Domingos a las 09.45 horas
Pues mira.
Una alegría muy grande por el reconocimiento
y que se hubiera acordado de mí
mis amigos de todas las personas de El Escorial, a las que quiero.
Y sobretodo también porque fue muy interesante,
porque son las fiesta de San Bernabé
y yo pude hablar de Bernabé, un siervo de Jesucristo
al que admiro y que me parece una persona
digna de conocer más profundamente.
Efectivamente, realmente fue un momento
para el pueblo de Israel,
que estaban en ese momento en Egipto.
Muy difícil.
Bueno, el faraón ve una amenaza,
el crecimiento del pueblo de Israel.
Y por resumir, decide que los hijos varones
se han echado al río.
Entonces, un matrimonio tiene un niño.
Un niño precioso.
Luego lo intenta retener tres meses en su casa.
Pero llega un momento que es insostenible.
Entonces, decide hacer una canastilla
impermeabilizarla con los medios que tenían en aquel momento.
Y ponerlo en el río.
En cerca de una zona de juncos
donde se vaya a la hija del faraón.
Y efectivamente,
esta mujer se percata de que hay allí un niño,
se lo traen en el canasto.
Está llorando y, una hermana, Miriam María,
que estaba por allí cerquita.
Pues en ese momento se acerca
y le ofrece a la hija del faraón.
Una mujer para que le cuide, le amamante el niño
hasta que sea mayor.
Efectivamente, acepta
y lo lleva a casa de sus padres.
Del modo, de ese modo,
pues el niño Moisés.
Se salva de las aguas, se salva,
empieza a crecer en la familia de sus padres
y posteriormente ya, se ha llevado, a casa de la hija del faraón,
que lo cría.
Y bueno, pues le puso el nombre de Moisés.
Hombre, esta mujer en lo poquito que nos da el Antiguo Testamento
sobre el Pentateuco sobre ella.
Pero se ve varios rasgos.
En primer lugar.
Una actitud de no ponerse a llorar
y a lamentarse, porque voy a perder a mi hermano.
Tal vez, hubo un plan detrás de donde se deposita el niño.
Había una mujer con fe,
es decir, cabe la posibilidad de que Dios puede hacer algo.
No sabían nadar que iba a pasar, pero,
esta mujer está ahí pendiente
y cuando surge la oportunidad, en este momento, sale adelante.
Sale, eh.
Yo te puedo ofrecer una mujer para cuidar al niño.
Es decir, es una mujer con decisión.
Se ve que es una mujer con fe
y que algo muy importante
está pendiente de cuando hay una buena oportunidad
para algo importante.
En este caso para su hermano,
su hermanito querido, sale adelante. Por lo tanto, tiene rasgos
muy significativos, muy valiosos.
Hombre, pues en ese momento,
en ese cántico del final de ese cántico de Moisés,
que nos recoge el libro de los números, pues es fantástico.
Es decir, es un momento en que cuando han conseguido
salir de la esclavitud de Egipto,
cuando por mano poderosa de Dios han conseguido pasar el mar
y quién le persigue quien trataba de evitarle ese,
esa salida hacia la tierra prometida.
Todo lo que... queda hundido en el mar,
entonces, en esa en la parte final. Ahí...
Miriam sale adelante con un pandero
con un instrumento musical de aquel tiempo.
Salen cantando y bailando
un grupo de mujeres de las que habían sido liberadas de la esclavitud.
Y entonces lo que expresa es el gozo.
Por otro lado, la capacidad de ponerse adelante,
de decir a las mujeres vamos a celebrar
lo que es verdaderamente Dios ha hecho con nosotros.
Fíjate, entre paréntesis un aspecto importante.
Los cristianos vemos desde el principio
y sobre todo, es el Nuevo Testamento.
En el antiguo.
Como una prefiguración.
Un aspecto que se llama la tipología, es decir,
cosas que ocurren en el Antiguo Testamento
que prefiguran lo que va a traer Jesucristo después.
Y efectivamente, la redención de un pueblo esclavo
pasa a través del mar por el desierto,
hacia la tierra prometida.
Está per figurando la acción de Jesucristo con su pueblo,
que nos ha sacado de una situación de esclavitud
que ha dejado en el mar a los que hemos creído en él
aquello, que nos perseguía para impedirnos
desarrollar plenamente la libertad que Dios quiere hacer con nosotros.
Y entonces, claro que eso,
Miriam no capte se ponga a cantar a bailar y a celebrarlo.
Creo que para mí, para nosotros como cristianos en el día de hoy,
es un ejemplo del gozo que sentimos con la liberación de Dios
cuando hemos creído en él
y nos ha sacado de un mundo de esclavitud a un mundo de libertad,
Hombre la importancia que tienes que describir un hecho.
Es decir,
que no debía de ser sorprendente.
Dios llama a las personas en función de su libertad
y en función de lo que él ve para misiones concretas.
En este momento, llamo a tres personas
para una misión de liderar.
La salida del pueblo de la esclavitud, fueron Moisés.
Tres hermanos: Moisés, Aarón y Miriam María.
Entonces los tres son muy importantes, dice el texto.
Moisés es con el que Dios habla cara a cara, el único,
el verdaderamente,
persona que Dios llama y señala para ese liderazgo,
pero pone a su lado también.
A dos, que llama el Antiguo Testamento, profetas
a su hermano Aron, y a su hermana Miriam.
Eh, claro, la labor que desempeñan es muy importante.
Lo hemos visto solamente en ese fragmento
de ese cántico en el que ella dirige a las mujeres,
a celebrar la liberación.
Pero es muy importante, porque necesitas personas adecuadas
que tiren adelante de los demás.
Y es una advertencia importante.
El día de hoy.
Ojo, estamos hablando de muchos siglos antes de Cristo
y Dios llama, a mujeres, no solo a ella.
En otros momentos, a otras,
para tomar una posición de liderazgo.
No es nada nuevo.
Deberíamos de a veces, sobretodo los cristianos a veces
en algún momento de pensar si Dios llama, a una mujer,
a un movimiento de liderar.
Quién somos los demás.
En fin, creo que esta pregunta debía de sobrar
Me alegro cómo me has planteado la pregunta,
porque, subyace, cómo se cuentan las cosas.
Exactamente el texto dice
que quienes murmuraron fueron los dos:
Aron y Miriam, los dos hermanos.
Y normalmente, fíjate a veces,
tenemos qué, bueno es que Miriam estaba cuchicheando, un momento.
Los dos, los dos... empezaron
a cuchichear...
Sobre la mujer.
Séfora, la mujer que tiene Moisés,
porque era dice el texto, "excusita", de otra zona.
Pero empezaron no solo eso.
No sólo hablaron de su mujer.
Empezó a decir,
Bueno, nosotros también somos profetas.
Los dos, Aron y Miriam.
Oye nosotros también.
Y es curioso.
Dios interviene a los dos.
Y hay un momento que llama a los tres.
A Moisés, Aarón y Miriam,
venid para acá un momento.
Y toma aparte.
A ellos dos y les lee la cartilla
lee la cartilla bien leída.
Vamos a ver.
Vosotros sois profetas y yo os he hablado
por medio de visiones, de sueños.
Pero a Moisés yo le hablo cara a cara.
Y entre comillas, el texto traduce un cabreo de Dios importante.
Y realmente lo interesante del dato es que cómo reaccionan.
Aron y Miriam y es muy bonito cómo reaccionan.
Se dan cuenta que han metido la pata.
Se dan cuenta que han hecho mal,
se dan cuenta que, y qué es lo que hacen.
Van a hablar con Moisés,
Moisés, que dice el texto, que era un hombre manso y sencillo.
Es curioso, le reconocen lo que han hecho mal,
les piden perdón y,
muy, algo muy importante.
Las consecuencias que ese mal hecho han traído sobre Miriam
Moisés, clama a Dios.
Le clama a Dios por ella.
Es muy bonito.
Cómo él le pide que le quite aquella lepra
que había caído sobre sobre su cuerpo.
Entonces, lo importante en este caso es,
los dos metieron la pata.
Dios, Dios habló con los dos, y solo una cosa más,
no les no entro a debatir.
Qué tipo de mujer tenía... Moisés
no entró por ahí.
Muchas gracias.
Subtitulado por, María Sánchez Grano de Oro
Miriam ha pasado a la historia principalmente como la hermana de Moisés que le protegió cuando flotaba en las aguas del río Nilo en una canasta.