El mundo de la droga ha mostrado una enorme capacidad para adaptarse a las restricciones de la pandemia. Es una de las conclusiones del último informe anual del Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomanías con sede en Lisboa. A través del internet oculto ha utilizado la informática y las redes sociales para funcionar en el nuevo escenario. Los camellos han sido sustituidos por ordenadores. Se ha recuperado el consumo tras la situación de cierre de los primeros meses del COVID y han aparecido hasta medio centenar de nuevas sustancias, algunas extremadamente peligrosas. El responsable de la unidad de Epidemiología del Observatorio europeo de Drogas, Julián Vicente, confirma que se mantiene el consumo de las drogas tradicionales en la Unión Europea, como cannabis, heroína y cocaína, pero advierte que son potenciadas con aditivos sintéticos lo que las hace más tóxicas.
Además, un reportaje de nuestra compañera Rosa Basteiro sobre la nueva estrategia de Biodiversidad para 2030 aprobada en la Eurocámara.
