Una de las grandes preocupaciones europeas de estos meses de verano ha sido el incremento de la tensión en el Mediterráneo oriental. Turquía tiene desplegados un buque de prospecciones petrolíferas y varias fragatas de apoyo en una zona que Grecia y Chipre consideran territorio propio. Como respuesta, estos dos países junto a Francia e Italia desarrollaron unos ejercicios militares. Nacho Sánchez Amor, eurodiputado del PSOE y relator permanente del Parlamento Europeo para Turquía, reconoce que quizás sería necesaria la convocatoria de una conferencia internacional para el reparto de los recursos de la zona, pero que la Unión Europea no puede actuar bajo la presión militar de Turquía, una presión que ha calificado de inadmisible.
Por lo demás, este miércoles hemos conectado con Lucas González Ojeda, portavoz de la Comisión Europea en Madrid.
