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Rodrigo Rato se sienta por tercera vez en el banquillo para aclarar el origen de su fortuna. Está acusado de 11 delitos y se enfrenta a 70 años de cárcel. De la cúpula del poder económico mundial a la cárcel de Soto del Real. El declive de Rodrigo Rato empezó con su detención en 2015, precisamente, por este caso, por presuntas irregularidades en su patrimonio; desde entonces, le han perseguido los escándalos financieros.

"No ha sido difícil escribir el libro porque la experiencia de esos años ya estaba escrita, solo había que volcarlo en otro soporte", ha indicado en Las Mañanas de RNE el periodista Juan Emilio Maíllo, autor del libro 'Bankia desde dentro'. En él, Maíllo habla de los entresijos de la entidad bancaria, pasando desde los años del colapso hasta su integración en CaixaBank: "vivimos tantas experiencias en aquella etapa que, cuando lo hablábamos, siempre decíamos 'esto hay que contarlo'", ha señalado el periodista. Juan Emilio Maíllo asegura que "sin el compromiso de la gente" habría "sido imposible" sacar adelante a la entidad tras perder 19.000 millones de euros, y ha explicado cómo, durante esos años, pusieron todos sus esfuerzos en volver a ganarse la confianza y la credibilidad de su clientela.

Rodrigo Rato presenta el libro Hasta aquí hemos llegado, que ha escrito junto a su esposa Alicia González. Es un relato en primera persona, desde su cúspide en la política y en el sector financiero hasta su paso por prisión. "Tengo la sensación de haber pasado por un largo purgatorio", afirma en el informativo 24 horas de RNE. Asegura que "no es un libro de exculpación", ya que reconoce sus errores. Además, confiesa varios arrepentimientos: "Me arreptiento de haber aceptado dinero público para la fusión, de haber mantenido el sistema de tarjetas de crédito, probablemente de no haberme ido cuando me plantearon la salida a bolsa y desde luego de haberme fiado de la amnistía fiscal que había diseñado el Partido Popular".

El exvicepresidente económico del Gobierno Rodrigo Rato y el exministro Federico Trillo han dicho no reconocer la "veracidad" de los llamados 'papeles de Bárcenas' durante el juicio po la 'Caja B' del PP y han negado haber recibido dinero alguno del extesorero del Partido Popular Luis Bárcenas.

“A mí Bárcenas no me ha dado dinero nunca”, ha sentenciado Rodrigo Rato durante su comparecencia, en la que ha dicho desconocer “el origen y la veracidad” de los supuestos apuntes de la contabilidad paralela del PP que llevaba el extesorero y que se dieron a conocer en la prensa a principios de 2013.

Trillo, por su parte, ha tildado de "cuento" la declaración de Bárcenas en 2013 durante el juicio por la primera etapa del caso 'Gürtel', en la que aseguró que el extesorero que precedió a Bárcenas, Álvaro Lapuerta, se negó a entregar al recién nombrado ministro una "compensación" económica que después sí efectuó Bárcenas -según su versión- para suplir el menor sueldo que recibiría como parte del Gobierno tras haber abandonado la presidencia del Congreso de los Diputados, mejor remunerada.

El exvicepresidente económico del Gobierno Rodrigo Rato ha asegurado que el extesorero del PP Luis Bárcenas no le ha dado “dinero nunca”. Rato, que se encuentra en libertad condicional tras haber sido condenado por el uso de las tarjetas black de Caja Madrid, ha declarado como testigo en el juicio de la Audiencia Nacional por la ‘caja B’ del PP en la misma línea que los expresidentes del Gobierno José María Aznar y Mariano Rajoy y al igual que otros exsecretarios generales del partido como María Dolores de Cospedal, Francisco Álvarez Cascos o Javier Arenas. “A mí Bárcenas no me ha dado dinero nunca”, ha sentenciado durante su comparecencia por videoconferencia, en la que ha dicho desconocer “el origen y la veracidad” de los supuestos apuntes de la contabilidad paralela del PP que llevaba el extesorero y que se dieron a conocer en la prensa a principios de 2013.

Rodrigo Rato está a un paso de sentarse otra vez en el banquillo de los acusados. Dos semanas después de que le concedieran la libertad condicional, un juez de Madrid ha procesado al expresidente de Bankia y exvicepresidente del Gobierno por el origen de su patrimonio y los contratos publicitarios suscritos cuando presidía la entidad.

En concreto, el juez cree que Rato blanqueó 7,8 millones de euros a través de empresas custodiadas por testaferros en paraísos fiscales bajo la apariencia de negocio lícito. Un dinero por el que eludió el pago de más de 3 millones en impuestos y que provenía de trabajos de asesoría a Telefónica y de conferencias que impartía. Además, el magistrado ve acreditado que se valiese de su posición como presidente de Bankia para conceder contratos publicitarios inflados mediante el pago de comisiones a las empresas Publicis y Zenith. Foto: EFE/RODRIGO JIMÉNEZ

Tras seis años de investigación, el magistrado Antonio Serrano-Arnal atribuye a Rodrigo Rato delitos de corrupción, blanqueo y fraude fiscal. Dos semanas después de salir de prisión por el caso de las'tarjetas Black' de Bankia, el ex vicepresidente del Gobierno ha conocido hoy que el juez que investiga el origen de su patrimonio quiere volver a sentarle en el banquillo. El juez Serrano-Arnal cree que Rato cobró comisiones de empresas de publicidad contratadas por Bankia, desvió dinero al extranjero y eludió sus obligaciones con el fisco. Junto al ex director gerente del FMI se propone juzgar a más de una decena de personas. Entre ellas están varios de sus presuntos testaferros y a la que fue su secretaria. Las partes tienen ahora cinco días para recurrir. Informa Teresa Coto

El que fuera vicepresidente del Gobierno y ministro de Economía durante los Gobiernos de José María Aznar y, posteriormente, director de Bankia y director gerente del FMI, Rodrigo Rato, ha sido puesto recientemente en libertad condicional tras cumplir dos de los cuatro años y medio de prisión a los que fue condenado por las 'tarjetas black'. Sin embargo, Rato tiene otra causa abierta. El juez Antonio Serrano-Arnal sospecha que se aprovechó del proceso de privatizaciones de sociedades públicas como Repsol, Endesa o Telefónica, a cambio de grandes contratos de publicidad e investiga si colocó a dedo en puestos de dirección a personas de su confianza. La causa, que se inició hace seis años, lleva paralizada desde 2019 debido a que el juez está reorganizando las actuaciones para elevarlas a la Audiencia Provincial de Madrid.

El que fuera vicepresidente del Gobierno abandona Soto del Real después de que la Audiencia Nacional le concediera el tercer grado este jueves. En su salida, se acercó a los medios para dar gracias a funcionarios de prisión y compañeros de módulo. "Mis compañeros del Soto del Real, del módulo diez, a los que espero dejar buen recuerdo. Les deseo suerte y justicia", declaró el exidirigente de Bankia. El ex vicepresidente económico cumplía pena de cuatro años y seis meses por apropiación indebida en el caso de las 'tarjetas black'. Informa Julio Leyte desde Soto del Real.