Enlaces accesibilidad
arriba Ir arriba

Cuando apenas intentaba recuperarse de los estragos turísticos que ha dejado la crisis de refugiados, la idílica isla griega de Kos ha sido golpeada durante la madrugada del viernes por un terremoto de una magnitud de 6,6 en la escala de Richter que ha dejado dos turistas muertos y un centenar de heridos, y que también se ha dejado sentir en la ciudad turística Bodrum, en la cercana costa turca.

El pasado viernes, día de la Fiesta Nacional, ya todo eran caras largas: un par de días antes, Pierre de Villiers había confesado sentirse literalmente "fastidiado" por la reducción presupuestaria de 850 millones de euros, algo más del 2% de la partida total. Lo había dicho a puerta cerrada, en una comisión de Defensa de la Asamblea Nacional, pero sus palabras trascendieron. Macron, al día siguiente, quiso dejar claro que él es el jefe y que no acepta presiones. De Villiers argumenta que se va porque no se veía "capaz" de mantener el "modelo de ejército" en el que cree "para garantizar la protección de Francia y de sus ciudadanos".