El entrenador del Atlético de Madrid, Diego Pablo Simeone, celebró contar en su equipo con jugadores como Antoine Griezmann y Julián Álvarez, decisivos en el 0-3 que sacaron de Mestalla, al tiempo que reconoció el enfado del Valencia con el penalti por manos de Javi Galán que no señaló el árbitro.
"Recién me mostraron la imagen del penal, la misma jugada de la Eurocopa, la mano esa que está muerta ahí abajo. Le pega en la mano, yo no entiendo nada, qué quieren que les diga, sinceramente en la Eurocopa era penal, Cucurella se quería morir. Dicen que la mano estaba muerta abajo, pero la pelota le pega en la mano", ha dicho.