Lula da Silva cumple cien días como presidente de Brasil. Un tercer mandato que comenzó con el asalto de miles de bolsonaristas a las sedes de los tres poderes del país y que ahora está en manos de la justicia. Ahora, hay calma en las calles, pero división con respecto a la valoración de la gestión del mandatario. El dirigente ha reafirmado en un discurso la vocación social de su gobierno y ha recuperado programas exitosos, como la bolsa familia, una ayuda a los más pobres. Sin embargo, el Congreso debe dar el visto bueno al proyecto de nuevas reglas fiscales, para que Lula pueda aumentar el gasto social.
Foto: AP Photo/Eraldo Peres