Enlaces accesibilidad

EE.UU. firma un acuerdo con España para rehabilitar Palomares y llevarse la tierra contaminada hace 50 años

  • El secretario de Estado de EE.UU., John Kerry, lo suscribe en su visita a España
  • Margallo: el acuerdo va a "reparar un error cometido hace 50 años"

Kerry no opina sobre el 20D, pero defiende una "España fuerte y unificada"

Por
John Kerry reitera su apoyo a una España "fuerte y unida"

El ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo, y el secretario de Estado norteamericano, John Kerry, han firmado este lunes un memorando de entendimiento en el que se comprometen a lograr una "rehabilitación mayor" del entorno de Palomares (Almería) y el traslado de tierra contaminada a un "emplazamiento adecuado" en Estados Unidos.

En rueda de prensa conjunta en la sede del Ministerio de Asuntos Exteriores, Margallo ha destacado que con el acuerdo que ambos han firmado se va a "reparar un error cometido hace 50 años" y que se empezará a ejecutar "en el plazo más breve posible" con las "infraestructuras necesarias para ello".

50 años después Estados Unidos se llevará la tierra de Palomares al desierto de Nevada

"Es el símbolo de la amistad entre los dos países, que son aliados y socios que confían el uno en el otro, el otro en el uno, y que juntos tenemos muchas cosas por hacer", ha subrayado el ministro español

El choque en el aire de dos aviones del Ejército estadounidense en una operación rutinaria de repostaje en vuelo hizo que el 17 de enero de 1966 cayeran cuatro bombas atómicas sobre el pueblo almeriense de Palomares, pedanía del municipio de Cuevas del Almanzora. Dos de las armas nucleares impactaron en el suelo y sus nueve kilos de combustible nuclear se diseminaron por la zona, en forma de óxidos de plutonio, uranio y americio fundamentalmente.

La imagen del entonces ministro de Información y Turismo, Manuel Fraga; el que fuera embajador de Estados Unidos en España, Angier Beiddle Duke, y el presidente entonces de la Agencia Efe, Carlos Sentís, bañándose en el mar para demostrar al mundo y a la población local que no había peligro para la salud se convirtió en un icono del suceso.

Pero pasados los años en la zona se detecta aún contaminación radiológica -muy baja y en dosis irrelevantes desde el punto de vista de la protección radiológica, según el Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (Ciemat)- y la población sigue sometida a controles.

Ahora, medio siglo más tarde, "bien está lo que bien acaba", según ha remarcado García-Margallo.

Aunque no ha ofrecido detalles más concretos sobre plazos de ejecución y cómo se repartirá la financiación del proceso de rehabilitación, el ministro ha asegurado que el trabajo "está muy avanzado" y "la voluntad es hacerlo ya, cuanto antes", para que Palomares "vuelva a la normalidad" anterior al accidente.

Por su parte, el secretario de Estado, de visita oficial en España, ha manifestado que el memorando de entendimiento marcará el camino para continuar con el "saneamiento" de la zona de Palomares. "Estados Unidos adoptará su responsabilidad y desempeñará su papel", ha subrayado Kerry.

Medio siglo de descontaminación

"A lo largo de 50 años hemos obrado juntos para poder asegurar el área, eliminar el suelo y descontaminar el área que ha sido contaminada, y asegurar la seguridad pública de las personas que viven allí. Eso continuará", ha añadido el secretario de Estado para poner fin a un suceso del que en tres meses se cumplirá medio siglo.

Inmediatamente después del accidente, las Fuerzas Armadas estadounidenses identificaron la zona afectada por la contaminación radiactiva, denominada Línea cero.

Comenzaron los trabajos de remediación sobre el suelo superficial y las cosechas, con unas operaciones que costaron a EEUU 80 millones de dólares de la época, y se retiraron, en 4.810 bidones, 1.400 toneladas de tierra y restos vegetales que fueron transportados por mar a ese país, donde quedaron depositados en el centro de reprocesamiento de materiales nucleares Savannah River Facility (Carolina del Sur) el 8 de abril de 1966.

Acabada esta intervención, se firmaron acuerdos entre el Departamento de Energía de EEUU y la Junta de Energía Nuclear, y dio comienzo el Proyecto Índalo para el seguimiento de la población potencialmente afectada y de la actividad residual de suelo, fauna y flora.

EE.UU. insiste en su apuesta por una "España fuerte y unificada"

Por otra parte, John Kerry no ha querido entrometerse las elecciones generales españolas del 20 de diciembre cuando los medios españoles le han preguntado si un posible nuevo gobierno de izquierdas afectaría a las relaciones entre ambos países.

En cambio, sí ha reiterado el mensaje lanzado en septiembre por Barack Obama ante el rey Felipe VI, en el sentido de que los estadounidenses quieren relacionarse con una "España fuerte y unificada".

En este sentido, el secretario de Estado norteamericano ha repetido que están "muy comprometidos" "en mantener una relación con una España fuerte y unificada" ('strong and unified', en palabras textuales), algo que, ha subrayado, sirve para tratar cuestiones como las referidas a la seguridad o lo que tiene que ver con la UE.