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Condenan a dos años al electricista de Picasso que guardó 271 cuadros

  • Su mujer también ha sido condenada
  • El acusado era el "hombre para todo" en la última residencia del artista
  • Las obras, valoradas en 60 millones de euros, deben ser restituidas

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Pierre Le Guennec, a su salida de la corte de Grasse (Francia).
Pierre Le Guennec, a su salida de la corte de Grasse (Francia).

El Tribunal Correccional de Grasse (en el sureste de Francia) ha condenado a dos años de cárcel, exentos de cumplimiento, al que fuera electricista de Picasso Pierre Le Guennec y a su esposa Danielle, que durante 37 años conservaron en secreto 271 obras del maestro andaluz, hasta que las sacaron a la luz en 2010.

Los jueces, que consideraron probado el delito de receptación -beneficiarse de bienes robados a sabiendas de su origen ilícito- condenaron también a la pareja Le Guennec a la restitución de las obras, una cuestión que es objeto en paralelo de un procedimiento civil, explicaron a Efe los abogados de las partes.

La pena es inferior a la solicitada el pasado 12 de febrero durante el juicio por la Fiscalía, que había reclamado cinco años de cárcel, también exentos de cumplimiento, para los dos septuagenarios.

La instrucción del dossier ha durado cuatro años. Pierre y Danielle Le Guennec afirmaban que Picasso y su última compañera, Jacqueline, les hicieron un día ese regalo. Claude Picasso, al frente de la Picasso Administration, se querelló en 2010 tras recibir en su sede parisina la visita de los Le Guennec y descubrir en su posesión 271 obras inéditas, ausentes de todos los inventarios, incluido el primero que se hizo inmediatamente después de la muerte de Picasso (1881-1973).

En la primavera de 2011, la pareja fue inculpada de receptación, delito que a diferencia del robo no prescribe en Francia. Según la acusación, las obras, creadas todas ellas entre 1900 y 1935, son de gran valor, en particular varios pequeños collages cubistas, valorados en unos 60 millones de euros. Ninguna está firmada, algo que según Claude, su padre sólo hacía cuando iba a regalar o vender una obra.

El "pequeño paquete" que el electricista no ha cesado de decir que un día recibió de manos de Jacqueline, con un "toma, es para ti", contiene también litografías, bocetos, dibujos y cuadernos de dibujos, entre ellos varios desnudos de dos de sus compañeras.