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Pegatinas con sensores táctiles para el cuerpo que permiten interactuar con el móvil

  • El prototipo creado de sensores se puede llevar en la mano, brazo o en la oreja
  • Sirven para contestar una llamada o controlar el reproductor de música
  • Están hechos de silicona, son flexibles, elásticos y compatibles con la piel

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Una mujer probando el sistema iSkin de sensores táctiles.
Una mujer probando el sistema iSkin de sensores táctiles.

La reducida pantalla de un reloj inteligente puede ser suficiente para ver el mensaje instantáneo que nos acaban de llegar, para estar al tanto de los últimos mails que recibimos o de qué tiempo va a hacer, pero puede quedarse pequeña y ser incómoda a la hora de interactuar con ella.

Un equipo de investigación de la Universidad de Saarland (Alemania) propone ir más allá en la forma de interactuar con los dispositivos móviles y ha creado un sistema de sensores táctiles, que de momento es un prototipo, y que van incorporados en una especie de pegatina hecha con materiales biocompatibles, flexibles y elásticos.

Cómo es y cómo funciona el sensor

Con el nombre de iSkin, estos sensores para llevar puestos sobre la piel son muy finos y se han desarrollado con diferentes formas y para distintas partes del cuerpo.

El sensor es customizable: los hay más pequeños para llevar en el dedo índice y poder manipularlo con el pulgar o también para la oreja; de tamaño medio para el dorso de la mano o más grande para el antebrazo.

Con esta interfaz, que pasa a ser una parte más del cuerpo humano, se puede controlar el reproductor de música para pasar de canción o subir y bajar el volumen. Los investigadores también han ideado una extensión desenrollable con forma de teclado para los smartwatch o la posibilidad de contestar llamadas con un sensor adaptable a la oreja.

iSkin es una especie de sándwich con múltiples capas de silicona con partes conductivas y no conductivas de polidimetilsiloxano (PDMS). Por tanto, está hecho con materiales compatibles con la piel, flexibles y elásticos y con un grosor de entre 0,3 y 0,7 milímetros.

En la actualidad el prototipo de pegatinas está conectado por cable a un sistema informático, pero los investigadores esperan que los microchips que lleva incorporados permitan la comunicación inalámbrica con los dispositivos móviles en un futuro.

Interesados por humanizar la tecnología

El grupo de investigación de la Universidad de Saarland ha presentado el sistema en la Conferencia de factores humanos en sistemas de computación (CHI 2015).

Este equipo lleva desde 2008 publicando investigaciones que ahondan en cómo mejorar la interacción del ser humano con la tecnología y de los propios dispositivos entre ellos.

Justifican este camino de estudio afirmando que la forma que predomina en la interacción con los sistemas informáticos actuales "no nos hace justicia como seres humanos", y apelan a lo artificial que puede llegar a ser tener que comunicarnos a través de "una ventana rectangular, plana y rígida que nos separa del mundo digital en lugar de integrarlo profundamente en nuestro mundo físico".

Partiendo de la teoría de que "las interfaces de usuario se combinan a la perfección con el mundo físico que nos rodea", estos investigadores han probado y estudiado todo tipo de dispositivos para obtener interacciones "más efectivas, expresivas y cautivantes".

En el siguiente vídeo en inglés (con subtítulos en inglés) los investigadores explican detalladamente iSkin: