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Libres con cargos los seis detenidos por colocar una ikurriña en el chupinazo de los sanfermines

  • Están imputados por un delito contra el orden público
  • Se han negado a declarar esta mañana ante el juez
  • El magistrado ha ordenado la intervención de los móviles de los imputados

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EL CHUPINAZO SE RETRASÓ POR DESPLIEGUE DE GRAN IKURRIÑA EN AYUNTAMIENTO
Foto de archivo del la gran ikurriña que se desplegó delante del Ayuntamiento y que retrasó el chupinazo de los sanfermines.

El titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Pamplona ha dejado en libertad, imputados por un delito contra el orden público, a los seis detenidos este martes en Pamplona y Berriozar por la colocación de una ikurriña gigante en la plaza Consistorial de Pamplona el pasado 6 de julio, durante el chupinazo de sanfermines.

Según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Navarra, el magistrado ha acordado que los arrestados, que se han negado a declarar, comparezcan en el juzgado una vez al mes. Además, indica que el auto puede ser recurrido.

Los seis han comparecido ante el juez esta mañana, al igual que la concejal de Bildu en el Ayuntamiento de Pamplona Patricia Perales, quien ha acudido "en condición de imputada para garantizar sus derechos constitucionales", aunque por el momento, el magistrado no ha dictado resolución judicial alguna en la que se le atribuya un hecho delictivo.

Intervención de los móviles de los imputados

En el marco de la instrucción, el juez ha ordenado la intervención de los móviles de los imputados y ha acordado recoger una muestra de su perfil genético para cotejarlo con las evidencias halladas en el lugar de los hechos.

Asimismo, el juez va a investigar las llamadas registradas en los días  previos al chupinazo entre la concejala y dos de los imputados.

El magistrado ha avanzado en su auto que de las diligencias practicadas se desprenden "claros indicios" de que fueron los detenidos quienes colocaron momentos antes de las 12:00 horas del 6 de julio una bandera de grandes dimensiones.

La ikurriña quedó colgada frente al balcón de la Casa Consistorial desde el que debía lanzarse el chupinazo, que se retrasó 20 minutos. Además, supuso un "claro riesgo" para las miles de personas que se encontraban en ese momento en la plaza Consistorial.

Según ha señalado el juez, el mero hecho de que nunca en toda la historia de los sanfermines se haya producido un retraso en el lanzamiento del chupinazo como el ocurrido este año, unido a la trascendencia e importancia de este evento, hacen que "el calificativo de grave no pueda ponerse en duda".

El chupinazo se retrasó 20 minutos

Además, ha asegurado que a la vista de las dimensiones de la bandera y la escasa distancia de la fachada de la Casa Consistorial era "inevitable" el retraso del cohete, puesto que "no podía correrse el riesgo de que impactara contra la tela".

En su opinión, es algo que debían saber los detenidos, todos ellos de Pamplona y su comarca, y pese a ello "no desistieron de su actuación".

Asimismo, ha añadido que habría que considerar que los hechos podrían constituir un delito del artículo 557.2 que castiga a quienes alteren el orden público en el interior de recintos donde se celebren eventos o espectáculos que congreguen a gran número de personas.

Por todo ello, el juez ha señalado que son "numerosos" los indicios de la participación de los acusados en los hechos, desde el tráfico de llamadas y datos de posicionamiento de los móviles, hasta la huella dactilar de uno de ellos en el lugar desde el que se desplegó la bandera y datos de compra de útiles empleados para cometer el delito.