Enlaces accesibilidad

Un grupo armado secuestra a dos turistas de EE.UU. y a su guía egipcio en el Sinaí

  • Lo ha anunciado la agencia oficial de noticias Mena
  • Querían presionar a las autoridades para la liberación de uno de sus parientes
  • En los últimos meses, se han producido varios secuestros de turistas extranjeros

Por

Un grupo de hombres armados ha secuestrado este viernes a dos turistas estadounidenses y su guía egipcio en la zona egipcia de Najl, en el sur de la península del Sinaí, ha informado la agencia oficial de noticias Mena.

Los secuestradores querían presionar a las autoridades para que liberen a uno de sus parientes que fue detenido por tráfico de drogas, ha añadido la agencia.

Los servicios de seguridad han recibido la denuncia de que un grupo armado de desconocidos había interceptado un autobús en el que se trasladaban varios turistas desde El Cairo a la localidad egipcia de Taba, en la frontera con Israel.

En el suceso han sido capturados un hombre y una mujer estadounidenses, así como su guía egipcio, ha precisado Mena, que ha señalado que las fuerzas egipcias están coordinándose con jefes de tribus de la zona para obtener la liberación de los rehenes y la detención de los secuestradores.

En los últimos meses se han producido secuestros de turistas extranjeros por parte de beduinos que tenían reivindicaciones similares, aunque siempre han sido liberados al poco tiempo.

La península del Sinaí, desmilitarizada a raíz de los acuerdos de paz de Camp David entre Israel y Egipto (1978), es uno de los principales polos de atracción turística en Egipto, gracias principalmente al turismo de playa y a monumentos como el monasterio de Santa Catalina.

Se calcula que en el Sinaí habitan unos 300.000 beduinos, distribuidos en unas quince tribus que se consideran descendientes de los grupos árabes originarios de la península Arábiga. 

Líderes tribales se han quejado en repetidas ocasiones de la marginación en la que viven sus comunidades y aseguran que la falta de atención de las autoridades les fuerza a dedicarse a actividades ilegales como el contrabando.