Los militares de Guinea-Bissau liberan al presidente y al principal candidato

• Están siendo trasladados a Abidjan, en Costa de Marfil
• Estaban detenidos desde el golpe de estado del 12 de abril

Fotografía del presidente interino de Guinea Bissau (I) y del primer ministro (D)

Soldados de Guinera-Bissau han liberado al presidente interino del país y al principal candidato en las elecciones presidenciales, a los que detuvieron tras el golpe de estado militar del pasado 12 de abril, según ha anunciado a los medios de comunicación el portavoz de la Junta militar en el poder, el coronel Daba Na Walna.

El ex primer ministro y principal candidato en las elecciones, Carlos Gomes Junior, y el presidente interino, Raimundo Pereira ha sido puestos en libertad a las 18.00 horas GMT (20.00 hora peninsular) tras el viaje que han realizado a Bissau una delegación militar de la Comunidad Económica de los Estados de África Occidental (CEDEAO).

Tanto el presidente interino como el principal candidato en las elecciones presidenciales han abandonado Bissau con destino Abiyán, en un vuelo en el que también viajaba la delegación militar de la CEDEAO, integrada por los jefes de Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Nigeria, Costa de Marfil y Senegal. Ambos han aterrizado ya en el lugar de destino, según ha constatado un corresponsal de la agencia France Presse.

La liberación de Pereira y Gomes ha despertado manifestaciones de alegría por parte de los seguidores y simpatizantes del ex gobernante Partido Africano para la Independencia de Guinea y Cabo Verde (PAIGC). Además, grupos de jóvenes han salido a la calle en los varios barrios periféricos de Bissau al recibir esta noticia.

Esta noticia se ha dado a conocer un día después de que la Comunidad Económica de los Estados de África Occidental (CEDEAO) anunciara el despliegue de una fuerza de 600 soldados en Guinea Bissau y diera un ultimátum de 72 horas a la junta militar para restablecer la legalidad constitucional en el país con amenazas de sanciones en caso de no producirse.

Así las cosas, el portavoz de la Junta militar en el poder, el coronel Daba Na Walna, ha anunciado también la formación de un gobierno de transición de un año en vez de los dos años previstos inicialmente por la Junta militar.

El futuro gobierno de transición "será un gobierno de tecnócratas y personalidades neutrales que se encargarán de gestionar la transición a doce meses", ha afirmado Na Walna. Este plazo de tiempo es el paso previo para la convocatoria de unas elecciones presidenciales y legislativas.

Asonada en plenas elecciones

El golpe de Estado de Guinea Bissau se produjo mientras el país -uno de los más pobres del mundo- se encontraba en pleno proceso electoral y listo para celebrar la segunda ronda de sus comicios presidenciales fijadas para el 29 de abril.

Los responsables de la asonada aseguraron que actúan contra un supuesto "acuerdo secreto" entre Guinea Bissau y Angola -que tiene desplegados unos 200 soldados destinados a ayudar en la reforma del Ejército guineano- que amenaza la soberanía nacional. La inestabilidad crónica que sufre el país ha convertido a Guinea Bissau en el eje del tráfico de cocaína entre Sudamérica y Europa, con la complicidad de la cúpula militar y los resopnsables políticos.

La Junta Militar que detenta el poder en Guinea Bissau llegó el pasado 14 de abril a un acuerdo con la CEDEAO para restaurar el orden constitucional.

El golpe de Estado también ha sido condenado por EE.UU., la Comunidad Económica de los Estados de África Occidental (CEDEAO), la Unión Africana (UA), Unión Europea (UE), Portugal (la antigua metrópoli de Guinea Bissau) y el Consejo de Seguridad de la ONU, entre otros.