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El Circo del Sol ama España

  • El Circo del Sol se plantea crear en Madrid una sede permanente
  • Tras el éxito de Corteo estrenarán en noviembre Zarkana

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Camas elásticas en 'Corteo'
Las camas elásticas son una de las novedades de 'Corteo'

El Circo del Sol en cifras

Nació en Quebec en 1984

Tiene 4000 empleados

50 nacionalidades diferentes

Shows permanentes en Las Vegas, Macao y Tokio

21 espectáculos en cartel

La imagen ya es una constante en la entrada al Grand Chapiteau situado en la Casa de Campo de Madrid. Largas filas de espectadores esperan para disfrutar de Corteo, el último espectáculo del Circo del Sol estrenado en España.

La mayoría ha comprado sus entradas (con un precio entre los 23 y los 140 euros), por Internet hace meses. La crisis económica que nos ahoga no se posa en el espectáculo de los de Quebec, que llena aforo (la gran carpa tiene capacidad para 2700 personas), día tras día, y cuenta con verdaderos seguidores incondicionales de la troupe internacional.

“A mi me gustó más Alegría (otro de los shows). En este (Corteo) la música es más triste pero es bonito”, asegura a la salida David, uno de los fieles de las funciones.

Un espectáculo a prueba de crisis

La melancolía forma parte del espíritu del espectáculo, dónde un payaso celebra su festivo funeral (Corteo significa 'cortejo fúnebre' en italiano), creado por el coreógrafo y clown Daniel Finzi. Una puesta en escena que incorpora nuevos números como las camas elásticas o la danza del helio.

Lo ridículo y lo trágico, esencia de la Comedia del Arte en la que se inspira, se funden en su representación más teatral. “Mauro, el payaso protagonista, dialoga con el público, algo que en las primeras funciones nunca ocurría. Todo es felliniano y mediterráneo”, cuenta a RTVE.es Adrián Gonzaléz, Director de Comunicación de Corteo, que ya se prepara para girar por Valencia, Alicante y Sevilla, tras prorrogar 14 días su estancia en Madrid.

Corteo parece tocado por la varita del éxito. Ha impulsado el idilio de los canadienses con nuestro país, que arrancó en 1998 con el estreno de Alegría, que evocaba la magia de los circos ambulantes que recorrían Europa hace décadas. Después vendrían Saltimbanco, Quidam, Drailon o Varekai, con idéntica afluencia de espectadores.

La gran carpa tiene capacidad para 2700 personas

El público ya está más que familiarizado con el lirismo de la antaño pequeña factoría circense que ha derivado en gigantesca multinacional del entretenimiento, con sede en varias ciudades como Macao o Tokio.

Entre sus últimos proyectos preparan una película con James Cameron como productor. El “espectáculo a lo grande” parece estar asegurado, en una nueva vuelta de tuerca por “contar con los mejores”.

De Alegría a Zarkana

El futuro de la compañía también pasa por España. La organización ya ha anunciado que en noviembre estrenarán Zarkana en el Madrid Arena, una producción a gran escala pensada para espacios amplios al estilo Las Vegas, donde cuentan con varias representaciones fijas.

La pirueta de Zarkana, que cuenta la historia de un mago que pierde su poder por amor, no es al azar. Con este montaje, dirigido por el director de cine y teatro François Girard (El violín rojo, Seda), “Madrid se convertirá en banco de pruebas” ya que la organización valora instalarse en la capital con un espectáculo permanente.

Zarkana cuenta la historia de un mago

“Es muy probable porque estamos particularmente encantados con el éxito de Corteo en Madrid, el mayor que hemos tenido en esta ciudad. Cuando termine Zarkana sabremos si hay potencial suficiente para un montaje estable”, ha declarado a Europa Press, Daniel Lamarre, Director Ejecutivo de la compañía.

Parece que la poesía visual soñada por su creador, Guy Laliberté, cuando ejercía de idealista mimo callejero allá por los 80, ha calado con fuerza entre el público español del siglo XXI.