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La ONU reúne al mundo para enderezar el Milenio

  • Líderes de 150 países buscan conciliar los Objetivos del Milenio con la crisis
  • Si no aceleran la ayuda al desarrollo será imposible su cumplimiento en 2015
  • Ban espera arañar compromisos pese a las promesas incumplidas

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Informe Semanal - El mayor reto de Naciones Unidas

Entre los verdes parajes de un resort de golf en Gleneagles (Escocia) y un mercado callejero en los suburbios de Accra (Ghana) hay más de 5.000 kilómetros, pero tienen algo en común: representan las dos caras de la moneda que se lanzará a partir de este lunes en Nueva York y de la que dependerá que se cumplan los Objetivos de Desarrollo del Milenio.

Sin embargo, mal que les pese a buena parte de los casi 150 líderes mundiales que se dan cita esta semana en la sede de Naciones Unidas, la cruz no se encuentra precisamente en Ghana, un país puesto como ejemplo de que acabar con la pobreza en el África subsahariana es posible, sino en los verdes campos de Escocia.

La Asamblea de la ONU ha terminado con modestos avances. Los líderes mundiales se han comprometido a actuar ante genocidios y crímenes de guerra y se ha avanzado en la definición de lo que es terrorismo.

Allí, líderes como Tony Blair, Jacques Chirac, Gerhard Schroeder y George W. Bush se comprometieron con palabras más o menos rimbombantes a aumentar a 25.000 millones de dólares anuales su ayuda a África para 2010, una promesa que ha sido abiertamente incumplida.

El impacto de la crisis

Como la propia ONU se ha encargado de recordar en un informe sobre el grado de cumplimiento de los países donantes de sus compromisos en ayuda oficial al desarrollo, "actualmente el desfase de financiación solo en lo que respecta a África es de 16.000 millones".

Y es que la crisis financiera desatada en todo el mundo en 2008 ha provocado que los compromisos adoptados en el idílico paraje escocés por las potencias del G-8 hayan quedado en papel mojado.

Más aún, el panorama que se dibuja para los próximos cinco años es desolador: mientras las grandes potencias han aprobado o aprobarán presupuestos de contención de gasto que provocarán el recorte más que probable de ayuda al desarrollo, el 'gap' financiero se hace más grande por no haber hecho los deberes en el último lustro y la propia crisis económica hará que para 2010 se añadan otros 64 millones a la cifra de personas que viven con menos de 1,25 dólares al día, el umbral de pobreza establecido por el Banco Mundial.

En total, los países donantes han dado 120.000 millones de dólares en ayuda en 2009 (un 0,31% del PIB) y deberían llegar a los 300.000 millones en 2015 (es decir, el 0,7%).

Presión de la ONU

Por este motivo, se esperan anuncios de incrementos de donaciones, aunque las dañadas finanzas públicas y las promesas rotas hacen que las expectativas estén a la baja.

Por ejemplo, la UE ha desvelado que aumentará en 1.000 millones de dólares su paquete de ayuda asi como 750.000 millones el Banco Mundial. La Administración Obama no ha adelantado si hará un anuncio similar.

"No podemos fallar a los miles de millones de personas que esperan que la comunidad internacional cumpla su promesa de un mundo mejor", ha advertido el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, que considera que no alcanzar los objetivos "representaría un inaceptable fracaso, moral y práctico".

"La incertidumbre económica no puede ser excusa para frenar nuestros esfuerzos de desarrollo", ha declarado Ban. "Invirtiendo en los Objetivos del Milenio estamos invirtiendo en el crecimiento económico mundial", ha precisado.

La alianza mundial para el desarrollo se encuentra en una coyuntura crítica, dice la ONU

Lo cierto es que, como el último informe de la ONU (pdf) destaca, "la alianza mundial para el desarrollo -es decir, el Objetivo 8- se encuentra en una coyuntura crítica".

La propuesta francesa

Pero, ¿cómo lograr redoblar los esfuerzos en la ayuda con una perspectiva de recortes presupuestarios y de crecimiento económico débil para el próximo lustro?

Posible respuesta: más impuestos o, como lo llaman los promotores de una iniciativa que se presentará este martes -Francia, Japón y Bélgica- "innovación financiera".

Se trataría de imponer tasas de 'solidaridad' a una serie de sectores económicos, como ya ha hecho Francia en el caso de los billetes de avión.

Philippe Douste-Blazy, ex ministro de finanzas francés y asesor especial de la ONU para este asunto ha detallado a AFP que el desarrollo de estas iniciativas "es un concepto clave si realmente nos preocupamos de movilizar recursos sostenibles, predecibles y adicionales que necesitamos desesperadamente para cumplor los Objetivos del Milenio".

El alcance de estas tasas podría llegar incluso a los mercados financieros, uno de los enemigos favoritos del presidente francés, Nicolás Sarkozy, que será el primer líder mundial en comparecer en rueda de prensa en Naciones Unidas, previa reunión con el cantante de U2, Bono.

Un mundo distinto

Sarkozy, como Obama, Merkel o Cameron, no estuvo en la cumbre de hace cinco años en Escocia. De hecho, aunque quisieran esos mismos líderes ya no podrían declarar por su cuenta que acabarán con la pobreza en África, porque el mundo en el que viven es distinto.

La crisis económica ha convertido al G20 en el principal organismo de referencia y en él países emergentes que han cumplido buena parte de estos Objetivos del Milenio cada vez tienen más protagonismo.

Precisamente uno de los aspectos positivos que desvelaba el último informe de la ONU es el aumento de la colaboración Sur-Sur.

Frente a las promesas del G8 de incrementar la ayuda al desarrollo, los que han logrado hacerlo de manera espectacular son los que no están en ese grupo.

En 2008, los emergentes aportaron casi 10.000 millones de dólares, una cifra que en 2010 podría llegar a los 15.000 millones. Arabia Saudí, Turquía, China o Brasil son los países que más destacan entre los donantes.

Además, el propio Ban ha querido aumentar la presión sobre los donantes con la creación de un grupo de 'campeones' por los Objetivos del Milenio, en el que están artistas, filántropos como Bill Gates y líderes políticos como el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero -que también comparece el lunes- y el polémico presidente de Ruanda, Paul Kagame.

Balance mixto

Los datos que esgrime son incontestables: Alrededor de 1.400 millones de personas siguen subsistiendo con menos de 1,25 dólares al día, de los que 1.000 millones padecen hambre.

Además casi nueve millones de niños mueren antes de cumplir los cinco años y cientos de miles de mujeres mueren debido a complicaciones derivadas del embarazo o el parto, dos objetivos -la salud materna y la mortalidad infantil- que se pondrá como principal reto la ONU para esta cumbre al considerar que son los que tienen más lejano cumplimiento.

De hecho, se espera que en un acto que cerrará la cumbre Ban lance una nueva Estrategia Global para la Mejora de la Salud de Mujeres y Niños, que pretende salvar la vida de 16 millones de personas.

Con todo, el Informe sobre los objetivos de desarrollo del Milenio 2010, publicado por la ONU este mes de junio,señala que varios países han logrado importante éxitos en la lucha contra la pobreza, así como en otros objetivos como la mejora de la matriculación escolar, la expansión del acceso al agua potable, el fortalecimiento del control sobre la malaria y la tuberculosis y en la mejora del acceso a tratamientos contra el VIH.

El Objetivo más simbólico de los ocho es el de conseguir reducir a la mitad la población que vive con menos de un dólar al día. Este avance se ha conseguido de manera espectacular en el este de Asia, la región que desde Naciones Unidas se pone como ejemplo al esperar que la pobreza pase del 51% en 1990 al 24% en 2015.

Mientras, en el otro lado, se da por seguro que el África Subsahariana no logrará llegar a esa meta, algo que ha sido criticado por algunos expertos y ONG, que consideran que el continente negro sale perdiendo con el recuento actual.

Perjuicio a África

Ya hace tres años, William Easterly, experto de la Brookings Institution sobre desarrollo, señalaba que el hecho de que los Objetivos del Milenio tomasen como año base 1990 "hace que África esté peor de lo que está".

En la misma línea, un estudio realizado por el Oversees Development Institute en colaboración con la Fundación Bill y Melinda Gates, señala que muchos países africanos están logrando "tremendos avances" y que la opción de la ONU de medir los progresivos relativos -es decir en porcentaje- y no absolutos proyectan una sensación de fracaso que desmoraliza a toda la región.

En este sentido, el Center for Global Development ha hecho su propio ránking alternativo de cumplimiento de los Objetivos del Milenio, corrigiendo las irregularidades detectadas.

El resultado es sorprendente: el país que mejor comportamiento ha demostrado en todas las categorías estos años sería Honduras, seguida de Laos, Etiopía, Uganda, Burkina Faso, Nepal, Camboya y Ghana.

Ghana, la cara

Más sorprendente aún es comparar esta lista con la de países que han recibido más ayuda durante estos años: los dos que más dinero han recibido han sido Irak -con mucha diferencia- y Afganistán, que precisamente se coloca a la cola en los cumplimientos de Objetivos del Milenio.

"En última instancia, la ayuda por sí misma está lejos de ser suficiente para lograr los fines que se buscan", advierte Daniel Kauffmann, otro experto de la Brookings, que señala la gobernanza como uno los pilares olvidados a la hora de definir los Objetivos del Milenio.

Y es que lo que no se ha cumplido con Gleneagles se puede lograr con Ghana, que precisamente ha destacado por la calidad de sus instituciones y las reformas emprendidas en la agricultura con buena gobernanza

Por eso, pese a recibir entre 2000 y 2010 la mitad de ayuda internacional que Sudán, cuatro veces menos que Afganistán y ocho que Irak, este país subsahariano ha plasmado la revolución que ansiaba la ONU al establecer estas metas hace diez años:

"En Accra, la abundancia de frutas, vegetales y verduras producidos localmente en los mercados evidencia un hallazgo único: Han reducido el hambre cerca del 75% entre 1990 y 2004, una mejora impresionante que se ha reflejado en la reducción de la tasa de pobreza, que ha caído del 51% al 30% en el mismo periodo", señala Mark Shuzsman, de la Fundación Gates. No en vano, con casi toda probabilidad, será el primer país del África subsahariana en salir de la pobreza.