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Fernando Lugo ya es presidente de Paraguay

  • El obispo Lugo ha jurado su cargo como nuevo presidente de Paraguay
  • Una decena de jefes de estado asisten a la jura
  • El Príncipe Felipe representa a España en el acto
  • Lugo cuenta con una dispensa papal de su condición de sacerdote

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Fernando Lugo ya es presidente de Paraguay

Fernando Lugo, ex obispo paraguayo, ya es el nuevo presidente de Paraguay. Poco antes de las tres de la tarde, hora de Madrid, ha jurado su cargo ante una decena de jefes de estado y ante el Príncipe Felipe, que representa a España.

Lugo, de 57 años y que sucede en el cargo a Nicanor Duarte, ha recibido el bastón de mando del presidente del Congreso, Enrique González Quintana, en una ceremonia que tuvo lugar en la explanada del Congreso ante varios miles de personas.

La ceremonia no ha estado exenta de anécdotas, como cuando el nuevo presidente tomó posesión al grito de "¡Sí, lo juro!", o como el momento en que el nuevo presidente rompió en sollozos de emoción.

Discurso renovador

Vestido con una sencilla camisa blanca tradicional, Lugo ha jurado su cargo y se convierte en el primer presidente en más de 60 años que no es del Partido Conservador. Líder de una amalgama de formaciones liberales, próximo al socialismo de presidentes como el brasileño Lula Da Silva, este ex obispo promete transformar el país sudamericano.

Ese ansia transformadora se ha dejado notar en su discurso de investidura. Vivamente emocionado, Lugo ha pedido a los paraguayos que despierten nuevamente y que le ayuden a enfrentarse a los desafíos que tiene el país ante sí. "No será tarea fácil, pero no será imposible", ha asegurado Lugo.

También ha hablado del reciente pasado dictatorial del país y de la necesidad de recuperar la "innegociable dignidad del pueblo partaguayo".

"Es importante que vuestro presidente deje en claro un tema: el cambio no es una cuestión electoral, es una apuesta cultural, quizás el más importante en su historia. No nos interesan vencedores ni vencidos", ha asegurado Lugo, quien ha remachado: "Hoy termina un Paraguay exclusivo, secretista, un Paraguay con fama de corrupción","Hoy termina un Paraguay exclusivo, secretista, un Paraguay con fama de corrupción"

Un obispo de los pobres

Carismático y polémico, Fernando Lugo se formó como sacerdote y se convirtió en un obispo muy cercano al pueblo y, sobre todo, a los pobres. Aferrado a sus ideas igualitarias, ha logrado desplazar del poder al omnipresente Partido Conservador y, además, ha conseguido algo inédito, que el Papa le dispense de su condición de sacerdote,  algo de lo que no había noticia en el catolicismo.

Cercano para unos a Chávez y su socialismo bolivariano, más próximo al mensaje sereno de Lula, lo cierto es que los paraguayos afrontan un auténtico cambio histórico.