Carlos ahora debe conseguir la simpatía de la nobleza. Muchas casas no le miran con buenos ojos el día que jura como rey
¿Será porque la soledad en un reino extranjero ha unido a estos dos personajes? ¿Será porque el idioma, el francés, les hace sentir que por fin alguien les entiende? ¿Será porque ella busca el favor del nuevo rey para que su futuro esté garantizado? ¿Será por qué de verdad se han enamorado el uno del otro?
Mientras el joven rey se dedica a descansar y a cazar, Chièvres y Ultrech son los encargados de gobernar Castilla. Nombramientos, favores y castigos que lo único que hacen es encrespar todavía más los ánimos de los castellanos. Su última ocurrencia tiene que ver con Fernando...