MasterChef 13 | Jordi Cruz, orgulloso del trabajo de Víctor en exteriores: "Ha salido gracias a ti"
- El aspirante lució orgulloso: "Ya era hora de hacer algo muy bien"
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Hasta hoy, el recorrido de Víctor en MasterChef 13 había sido una cuesta arriba eterna. A pesar de reconocer que es "de los que más estudia" en el tiempo libre que tienen, el fisioterapeuta no daba con la tecla a la hora de plasmar los conocimientos en sus platos. Las malas valoraciones se sucedieron en los cuatro primeros programas y en varias ocasiones estuvo en la cuerda floja. Pero en ningún momento dejó de creer en sí mismo. Y ha sido en la visita a Semillas cuando el aspirante ha recibido su primera gran valoración. Te contamos cómo fue el momento.
Todo sucedió tras el cocinado por equipos, donde Víctor formó parte del equipo rojo a las órdenes de Chema, capitán. Con un plato de bacalao por delante, Chema perdió el control que tan bien había mantenido hasta entonces. Y fue en ese momento cuando Víctor tomó las riendas y sacó la elaboración adelante. Por supuesto, esto no pasó desapercibido para los jueces y fue Jordi Cruz el encargado de dirigirse a Víctor: "El pescado ha salido gracias a ti. Recoge este halago con cariño. Enhorabuena". Además, nombró al aspirante como mejor de la prueba. La alegría de Víctor evidenció lo mal que lo había pasado en valoraciones anteriores. Pero para el fisioterapeuta el esfuerzo es innegociable y tenía claro que antes o después el trabajo daría sus resultados: "Estoy muy contento. Ya era hora de hacer algo bien".
La valentía de Víctor
Antes del inicio de la prueba de eliminación, Jordi quiso saber cómo encajó Víctor sus buenas palabras: "¿Cómo llevas los piropos?". Y la versión más humilde del aspirante salió a flote: "Se aprende mucho de los errores, yo estaba ya en posición de recibir. Ahora ya lo he racionalizado y me sirve de energía". Lo que también descubrió Víctor es que la tranquilidad que da el delantal blanco puede esfumarse en un segundo.
Con el cocinado ya en marcha, Pepe Rodríguez soltó la bomba a los aspirantes de la galería: "Tenéis una misión. Os tenéis que poner de acuerdo para dar el nombre de un compañero y salvarle de la eliminación". Tras la negociación, Yago fue el elegido. Pero la cosa no quedó ahí. Ahora debían elegir quién bajaría a jugarse la expulsión en lugar de Yago. Víctor no lo dudó y se ofreció. No fue el único y después de jugárselo a "piedra, papel o tijera", Víctor bajó a cocinar con toda la confianza del mundo: "Quiero que se vea mi cambio de actitud. Ya no quiero esconderme".
Con Martín Berasategui presente, Víctor le dedicó su plato. El chef invitado dejó claro lo complicado que fue el cocinado de Víctor: "Me parece impresionante lo que has hecho, has bajado, has cogido el toro por los cuernos y me dedicas el plato. La vida es para echar una mano y lo has hecho". Finalmente, a pesar de que los jueces tildaron el plato como algo "básico", valoraron que tuvo poco tiempo e ingredientes ya seleccionados y medio cocinados. Era un día para salvar los muebles y Víctor lo hizo. Ahora solo queda comprobar si estas dos buenas valoraciones serán el punto de inflexión del aspirante para despegar definitivamente.
