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Lo de Francia en Eurovisión es para quitarse el sombrero: A capela y sin micrófono ¡y se le oye en todo el estadio!

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Francia - Segunda Semifinal Eurovisión 2024: Slimane con "Mon Amour"

Slimane asombró a Europa en la Segunda Semifinal de Eurovisión. Hoy, en la gran Final, algo afónico, no ha dejado de luchar y ha dejado claro que viene a ganar Eurovisión para Francia. Su actuación ha sido soberbia. Un golpe sobre la mesa. Y lo ha conseguido sin artificios ni disfraces con elegancia y voz. Sólo eso. Ha conseguido convertir lo delicado en potencia y se ha metido a Europa en el bolsillo.

La puesta en escena de Francia en Eurovisión es una lección de estilo

Slimane representa a Francia en Eurovisión 2024 con la canción

Slimane representa a Francia en Eurovisión 2024 con la canción "Mon Amour"

La edición de 2024 va a ser recordada por su alto nivel. Buenas canciones y puestas en escena excepcionales como la de la bruja irlandesa Bambie Thug. Francia no ha necesitado nada más que una buena iluminación y una coordinación excelente con la steadycam, una cámara de televisión llevaba a hombro muy equilibrada con libertad de movimiento que se pega al cantante.

Slimane y el operador de esa cámara ejecutan una coreografía perfecta que consigue hacer sentir al espectador destinatario de las miradas enamoradas del francés. Sientes desde tu casa que te está cantando a ti, que se ha enamorado sin saber por qué y es inevitable sentirte parte de su conmovedora historia. Te arranca de tu salón y te lleva al escenario de Malmö. El publico asistente grabó estos momentos y se han viralizado en las redes sociales.

Prácticamente, toda la canción está realizada en un solo plano secuencia. Siguiendo la estela de Barbara Pravi en 2021, pero en una versión aún mejor que aquella, y era difícil mejorar aquella maravilla que le valió el segundo puesto a Francia.

El francés canta a pleno pulmón

Después de haber sentido que te has levantado de la cama con Slimane. Después de haber sentido sus caricias y después de haberte enamorado de sus versos, la realización rompe la narración para hacer una pausa en la música, escuchar un segundo de silencio y cambiar de plano, por primera vez.

Entonces llega el momento más apoteósico de la noche de Eurovisión. Slimane se aleja del micrófono 5 metros y canta a pleno pulmón la parte más desgarradora de su "Mon amour". Y simplemente, es precioso, emocionante y potente. ¡Se le oye en todo el estadio a capela! Sobrecogedor.

Slimane compite el sábado por el micrófono de cristal de Eurovisión 2024. Su balada épica, una carta de amor, compite contra el rock tecno barroco y rural de Croacia, la perfección del directo de Nemo, el contratenor pop de Suiza y la ouija de Irlanda...Tenemos la suerte de que este año todo puede ser porque la oferta musical es increíble.