Así ha sido el primer beso de Emilio y Luisa

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Luisa y Emilio han conquistado el corazón de los espectadores de La Moderna desde el primer momento. Poco a poco fueron conociéndose y se convirtieron en una de las parejas favoritas de la nueva serie de las tardes de La 1. Hemos visto cómo la pareja evolucionaba estas semanas, pasar de ser vecinos a enemigos, después amigos y ahora al fin, novios. No todos parecen estar contentos con esta relación, pero ellos están dispuestos a luchar contra todos los obstáculos.

Un mal comienzo

Desde el primer momento, Emilio se fijó en Luisa, pero ella no tenía ninguna intención de ser amiga suya. Más bien todo lo contrario, quería que Emilio y su hermano Raimundo se mantuviesen lejos de ella y de su familia. La fama de los hermanos Peña había llegado a oídos de los nuevos inquilinos de la corrala y Luisa quiso dejarle claro a Emilio que lo mejor era que respetasen las distancias, sobre todo con su hermano Pablo. Aquel primer momento fue un malentendido, ya que Emilio era el primero que pretendía alejar a Pablo de los sucios negocios de Raimundo.

Luisa le ordena a Emilio que se aleje de Pablo

“La escuela la he pisado poco, pero eso no significa que no sea un hombre de provecho. Y a tu hermano lo estaba intentando ayudar, que lo sepas”, le dice Emilio a Luisa muy enfadado después de que ella le reproche que Pablo pierda el rumbo si se junta con ellos.

El momento en que todo cambió

Todo aquello quedó atrás cuando Luisa descubrió que Emilio era el misterioso dibujante que completaba sus trabajos en el patio de la corrala. Así fue como la joven ilustradora conoció que el pequeño de los hermanos Peña tenía un talento oculto y que compartían afición. ¿Hay algo más bonito que eso? Para Luisa aquello fue decisivo y más si tenemos en cuenta que ella misma se siente incomprendida ya que no es un oficio respetado ni muy accesible en aquella época y menos para mujeres. De hecho, la propia Luisa intenta acercar posturas con Emilio diciéndole que puede tomar clases o buscar trabajo de eso mismo, pero él lo rechaza y se siente ofendido.

Fueron acercándose poco a poco, buscaban encontrarse en la corrala, e incluso a veces quedaban para ver libros de pintura o comentar alguna curiosidad sobre la misma, pero cuanto más se acercaban ellos, más en contra estaban los demás. Raimundo el primero, él veía cómo esta nueva amistad podría ser un inconveniente para sus negocios y, sobre todo, para su relación con su hermano. El cabecilla de la banda de la corrala se atrevió a amenazar a Luisa y aquello hizo que ella se mantuviese durante un tiempo alejada de Emilio. Excusa tras excusa fue rechazando todos los planes que Emilio le proponía para pasar tiempo juntos, hasta que al final se sinceró con él y le contó cuál era la verdadera razón por la que se había alejado.

Emilio y Luisa retoman sus paseos

Emilio entonces, no tuvo dudas y se atrevió a enfrentarse a Raimundo: “Te lo voy a decir solo una vez: deja en paz a Luisa, o tú y yo vamos a tener un problema muy gordo”. Entre los hermanos ha habido cierta tensión, pero tras la orden de Emilio de que su hermano no le dirija la palabra a Luisa, Raimundo intenta convencerle de que ella intenta separarlos y lo está consiguiendo. Una reacción que enfada todavía más a Emilio y que solo hace que insista en dejarle claro el mensaje: le quiere lejos de Luisa.

La bendición de Rosario

Ahora que Raimundo parece que deja de ser un obstáculo, tienen que sortear otro gran impedimento: la opinión de Rosario pesa más que ninguna. Aunque Luisa está decidida a seguir su instinto, no quiere contrariar a su madre. Sin embargo, los esfuerzos de Emilio por mejorar y llevar una vida honrada hacen que Luisa y su madre le vean con mejores ojos. Rosario reconoce al fin que él tiene un efecto positivo en Luisa y la hace estar más alegre, y ante eso, una madre no se puede negar. Es la última en dar su permiso, pero es un paso necesario. Después de esto, Luisa y Emilio empiezan a quedar sin esconderse, buscan dar paseos por Madrid y tienen una primera cita de verdad en el Madrid Cabaret.

Emilio y Luisa consiguen el permiso de Rosario

Un primer beso muy especial

Luisa y Emilio por fin nos han dejado ver una de sus citas. La pareja ha decidido visitar el Madrid Cabaret antes de que abran para el público, y así tener un momento para ellos solo ese lugar tan especial. Emilio no ha dudado en prepararle un delicioso cóctel a Luisa que han podido disfrutar juntos. Pero no solo han disfrutado de esa bebida, también del piano que se encuentra en el famoso local de Madrid. La hermana de Matilde se ha atrevido a preguntarle a Emilio si podría tocar algo para ella, sabiendo que la propia Matilde le vio tocar el piano en el salón de té. Emilio ha reconocido que no hay nada que pueda negarle a Luisa y se ha puesto manos al piano.

Emilio y Luisa se besan por primera vez

Un momento muy especial en el que Luisa y Emilio han conectado como nunca, tanto que ella se ha atrevido a darle su primer beso y él le ha correspondido. Un beso muy esperado por todos los seguidores de la serie que no han dudado en reaccionar al verlo.