El miércoles, 13 de enero, regresa La caza. Tramuntana, la serie revelación de Televisión Española. La sargento Sara Campos (Megan Montaner) y el cabo Víctor Gamero (Alain Hernández) vuelven a la acción para resolver un homicidio lleno de interrogantes en esta segunda temporada, que contará con la incorporación de Félix Gómez en la piel del sargento Selva.
Además, este año los espectadores tendrán la oportunidad de formar parte de otra investigación con el audiojuego de La caza. Tramuntana. Se trata de una experiencia inmersiva a través de los altavoces inteligentes de Alexa y Google Home, en la que los amantes del misterio y el suspense tendrán que ayudar al cabo Gamero a resolver un nuevo caso guiándose por su intuición.
Descubre al asesino en el audiojuego de La caza. Tramuntana
La caza. Tramuntana. El audiojuego es una experiencia transmedia inmersiva en la que el jugador se convertirá en miembro de la Guardia Civil y tendrá que ir recogiendo pruebas, testimonios e información para descubrir quién es el culpable de un nuevo caso.
Esta trama enlaza los personajes de la primera temporada con la segunda y sitúa a la audiencia en el nuevo contexto de ‘La caza. Tramuntana’. El jugador curioso podrá descubrir, además, datos que complementarán el visionado de la segunda temporada.
La experiencia del juego tiene una duración media de 20 minutos, que podrá variar según las decisiones que tome el jugador, ya que puede probar tantas vías de investigación como se les ocurra o incluso volver a empezar para descubrir nuevas rutas y finales.
De esta forma, RTVE, a la vanguardia de la innovación tecnológica y narrativa, lanza por primera vez en España un audiojuego con tecnología de asistentes de voz y 3D VR Binaural para una serie de ficción de producción nacional. Ahora ya no hay secretos entre el cabo y tú, lo único que tienes que decir es: “OK Google, lanza La caza. Tramuntana” o “Alexa, abre La caza. Tramuntana”, y ¡comienza el juego!
El reencuentro de Sara Campos y Víctor Gamero
Tras el éxito de la primera temporada de la serie de TVE y DLO Producciones, este miércoles podremos volver a ver a la sargento Campos y el cabo Gamero trabajando juntos para resolver un nuevo caso en la isla de Mallorca lleno de incógnitas. A la isla llegará también el sargento Selva, que será una pieza clave de la trama.
El personaje que interpreta Félix Gómez investigará a Sara porque hay sospechas de que ha falsificado su informe psicológico para llevar ese caso. "Pero a medida que avanza la investigación voy a descubirir que hay algo más encerrado y me voy a unir a esa investigación", ha explicado el actor en la presentación de la nueva temporada.
A la rueda de prensa, que se ha realizado a través de videollamada, han asistido Elena S. Sánchez (como presentadora del evento), Fernándo López Puig (director de Contenidos y Canales de TVE), José Manuel Lorenzo (productor ejecutivo de DLO Producciones) y los tres protagonistas, Megan Montaner, Alain Hernández y Félix Gómez.
La serie revelación de la pasada temporada
La caza. Monteperdido fue una de las ficciones de mayor éxito de 2019, con una media del 14% de cuota de pantalla y 2.162.000 espectadores. Además, fue una de las serie más consumidas de la web de RTVE, con más de 900.000 usuarios únicos en el mes de su despedida (mayo 2019).
La crítica también reconoció la producción de TVE, que fue galardonada con el Premio del Jurado en el Festival de Televisión de Vitoria 2019. Los expertos alabaron desde los "espléndidos escenarios naturales" al "sólido guion" de la serie, así como la magnífica interpretación del equipo artístico y la banda sonora original.
Otro reconocimiento que recibió fue el Premio del Público de la Sección Española de la XXII edición del Festival de Televisión de Luchon, donde compitió con otras series de TVE como Cuéntame cómo pasó o Malaka. Además, estuvo nominada a mejor ficción en de los Premios Prix Europa y Venice TV Award 2019, así como a los Premios Iris en cuatro categorías.



(Viento)
(Música new age)
(Pájaros)
(Canta un gallo)
¡Está nevando! ¡Está nevando!
Papá, date prisa. Quiero llegar antes al cole para jugar con la nieve.
¡Venga, dormilón!
Mañana se lo entregas. -Si no me queda nada.
¿Tienes amarillo?
Gracias.
Podría pintarlo con nieve.
-Estaba pensando bajar a Barbastro, al centro comercial.
Por si te apetece.
Un momento.
Ya casi estamos. Venga, "porfa", "porfa", Lucía, entrégalo mañana.
-Voy, espera. -Venga, "porfa", vamos.
Que ya vamos.
Vamos, vamos, vamos.
Venga, vamos.
(Música tranquila de guitarra)
(Timbre)
-Estaba más tranquila. -Es normal.
(Gritos de niños jugando)
-Molaría. -Mucho.
-¡Lucía!
-Ya está aquí otra vez la pesada. -Pero no la mires, ¿vale?
-Oye, chicas, esperad.
-(INSEGURA) Anda, Ximena, que... ahora iba a buscarte.
¿Tenemos que ir a piano, verdad? -Sí.
Lucía, ¿que se ha hecho tu hermano en el pelo? Parece una cerilla.
-Sí, vale se lo diré. -No, no, es que en serio,
le queda muy mal, porque con lo guapo que es Quim...
-Pero, ¿por qué eres tan pesada? -Venga, chicas, ya.
-¿Crees que mi hermano se va a poner supertriste por lo que le diga
"la colombiana"? Si ni siquiera sabe cómo te llamas.
¿Pero qué haces?
-¡No me vuelvas a llamar "la colombiana"!
-¡Espera! ¿Adónde vas? ¡Ximena!
Ximena, ¿adónde vas? ¡Espera!
(Música dramática)
¡Lucía!
Lucía, ¿estás ahí?
¡Lucía!
¡Lucía!
¡Uh!
(Crujido)
Oye, Lucía, si esto es una broma, no tiene gracia, ¿eh?
(Viento)
(Sintonía telediario)
-La Guardia Civil ha pedido la colaboración ciudadana.
La localidad oscense de Monteperdido se ha movilizado
para emprender la búsqueda de las niñas
desaparecidas en el día de ayer.
-Dos niñas de once años salieron del colegio "Valle del Ésera",
pero nunca llegaron a su casa.
Su rastro se pierde en el bosque que tengo a mi espalda...
-Las niñas conocían bien el camino, como ha asegurado el padre de...
-El portavoz de la Guardia Civil... -Las tareas de búsqueda...
se han tenido que suspender... -...un amigo de la familia.
-El tiempo pasa y es difícil olvidar lo sucedido.
-...no pierden las esperanza... -Y ha pedido a las autoridades...
-La investigación nunca deparó...
(VARIAS VOCES A LA VEZ)
-...y Lucía,
cuyos rostros se hicieron familiares para todo el país,
que esperaba que en cualquier momento miembros de la Guardia Civil
lograran dar con ellas.
"-No queremos rendirnos.
No podemos hacerlo, por la memoria de nuestras hijas.
Ana y Lucía desaparecieron
un 10 de febrero de 2014."
Hoy no están junto a nosotros,
pero eso no significa que hayan desaparecido de nuestras vidas.
Siguen tan presentes como aquel día.
Son la razón que hace que nos levantemos cada mañana,
porque no queremos resignarnos,
no queremos pasar página.
La Guardia Civil...
ha dejado de destinar recursos a la investigación,
pero las preguntas siguen ahí, sin respuesta.
¿Dónde están nuestras hijas?
¿Quién se las llevó?
Y nosotros... no queremos ni podemos bajar los brazos,
pero tampoco somos capaces de hacerlo solos.
Necesitamos la implicación de las autoridades,
que escuchen nuestras peticiones.
Me gustaría que el padre Bertrand se acercara y termináramos
con una oración por las niñas.
Gracias.
-Dios todopoderoso,
te pedimos que nos devuelvas a nuestras hijas
Ana y Lucía.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo.
"Padre nuestro que estás en los cielos..."
¿Quién ha llevado este caso?
La Comandancia de Huesca me ha dicho que la UCO de Madrid queda al mando.
No hemos podido volver a bajar al barranco. Hace viento
y es peligroso.
Quitaron la matrícula.
¿Y de la niña? ¿Sabemos algo?
(SUSPIRA CANSADA)
¿Cuándo se lo vas a decir?
No, no queda nada.
¡Gutiérrez, nos quedamos en el puesto!
Van a pensar que he empezado a mudarme.
¿Te recojo mañana y desayunamos juntos?
(Teléfono)
¡Víctor!
-¿Qué está pasando?
¿A qué vienen?
Víctor. Creo que tenemos derecho a saberlo.
(Timbre)
Déjese de prolegómenos. ¿Es mi hija sí o no?
(SORPRENDIDA)
¿Y mi hija?
-La niña, ¿qué ha dicho Ana?
-¿Dónde está mi Lucía?
¿Y qué están haciendo aquí? ¿Qué barranco es? ¿El de El Cajigal?
¿Y saben quién es ese hijo de puta?
Está muerta, ¿verdad? ¿Lucía está muerta?
¿Está muerta?
Luci, mírame. Lucía no está muerta.
-(SOLLOZANDO) Mi niña... -No está muerta.
(Arranca coche)
A sus órdenes. -Mi sargento.
¿Cómo está Ana? ¿Se sabe ya algo?
(Gruñido de animal)
(Gruñido de animal)
(Lamentos del perro)
(El perro aúlla)
(No da señal)
No puedo hacerlo.
Y yo le digo que no puedo retirarle la sedación,
no puedo correr ese riesgo. Lo siento mucho.
¿Qué?
Han puesto guardias en la entrada a la UVI,
no hay quien se acerque a la niña. -¿Sigue dormida?
No sé. Te lo habrían dicho a ti, ¿no?
Sí, seguro.
-¿Y tu madre? -Igual que siempre.
De noche en el hospital, por si le sienta mal la diálisis;
y, por la mañana, de vuelta a casa.
-¿Y este qué hace aquí?
Álvaro, ¿de dónde sales tú ahora? Oye, ¿estás sordo o qué?
No deje que se acerque a la niña.
"Mamá, ¿pero sabes grabar?
-¿Tú qué crees? -Es el botón rojo.
-Ya, ya lo sé. Venga, ¿qué me quieres enseñar?
-Mira lo que sé hacer. -Listilla.
¡Guau! (RÍE)
-Mira, voy a hacer el puente también.
-Lucía, te vas a romper la nuca. -Que no.
-¿No te pinchan las agujas esas los pies?"
(Puerta)
"A ver, otra co..."
¿Quim?
-Ahora, no, mamá. Quiero meterme en la cama.
Mañana me cuentas lo que sea. -Han encontrado a Ana.
Está viva.
Los de Madrid, sí.
Habitaciones... 11 y 12.
(NERVIOSA) Víctor, el cabo, trajo su equipaje
y lo subimos a su habitación.
El desayuno se sirve en la salita, de siete a diez.
La cocina ya está cerrada,
pero tiene una máquina de café abajo.
-¿Insomnio?
Vivo ahí enfrente.
Todas las noches la misma historia:
camisón, vaso de leche
y, después de dos horas dando vueltas por la cama, a tomar por culo,
otra noche en vela.
Nada, me doy a dar una vuelta por... por el pueblo
hasta que se me hinchan los ovarios. Y entonces me vengo aquí.
Es que a Elisa no le importa que me tumbe un ratito ahí, ¿sabe?
¿Puedo?
Caridad.
Sara Campos.
¿Has matado a alguien, Sara Campos? ¿O eres tú la muerta?
Pues... habría que ver al otro, ¿no? (RÍE)
Ah, bueno. Entonces, si es un can, que le zurzan.
Ahí se pudra el bicho.
Hay demasiados canes. Se cagan y se mean por todas partes.
Estás aquí por lo de las niñas, ¿verdad?
Qué cosa más fea.
de obstruir una investigación!
¡Qué hija de puta!
No, lo digo porque, claro, tú ahora te vas a dormir,
y a mí me quedan todavía una cuantas horas hasta la amanecida.
No te preocupes por el perro, Sara Campos.
Víctor ya ha llamado a Nicolás, el veterinario.
Seguro que sale de esta.
Esto es muy pequeño.
Ya te darás cuenta.
-¿Tú crees que Lucía está viva?
La bala ha salido limpia. Mira,
calibre nueve.
¿No la vas a denunciar? Menuda forma de empezar con la UCO:
"La sargento que odiaba a los perros".
Esto pasará factura, tienes que estar con ella todo el día.
Bueno, sobrevivirá. Con una cojera a lo mejor.
Le ha tocado el músculo.
Oye, hago lo que puedo. Que lo mío son las vacas. ¡Encima!
(Ranchera mexicana en el móvil)
Yo no bailo, ¿eh?
No lleva documentación.
Hasta que no saquemos el coche,
no vamos a poder ver el número de bastidor para identificarlo.
Estaban fuera del coche. Siempre pierden los zapatos.
(Móvil)
(CONVERSACIÓN LEJANA)
Tenías que haberme llamado anoche, habría venido para estar contigo.
Joder, Montse. No quiero ni pensar lo que habrás pasado.
-Estoy bien, Rafael. Ahora la que menos importa soy yo.
-Bueno, si es que todo está en manos de Ana, ¿no?
-Es la única que puede decirnos algo,
aunque sea que mi hija está muerta. -Venga, no te pongas en lo peor.
Si tuvieran esa sospecha, se lo habrían dicho a tu marido.
-¿Te quedas con mi hermana?
Iré al hospital por si Joaquín necesita algo.
(MONTSE) Gracias, Rafael. (NICOLÁS) ¿No te ha llamado Raquel?
(MONTSE) A lo mejor tenía que haberla llamado yo.
(NICOLÁS) Déjala ahora. ¿Qué te va a decir? La niña está en el quirófano.
(MONTSE) Al menos está a su lado.
(NICOLÁS) Bueno, Quim está arriba. ¿Qué más quieres?
(MONTSE) ¿Que qué más quiero? -Bueno, sí, ya sé que...
(MONTSE) Nunca me imaginé que...
-Es posible que mañana aparezca tu hija.
No puedo garantizarle cuál será el resultado.
Puede ser. Tenemos que realizarle una craniectomía descompresiva.
Aunque el edema no es grande, la presión aumentaba y...
(Sirena)
¡Mi sargento, hemos encontrado un cobertizo!
-Limpio, mi sargento.
-¡Simón!
¿Qué niñas?
(Ruedas de coche)
Al final me soltaron a las tantas del cuartel.
¿Cómo estás? ¿Cómo estás, Ana?
Fue hace mucho tiempo.
Le pusieron cosas que no eran suyas.
Mi Simón no hace eso.
Tengo que... preparar la comida.
No sé quién es Lucía.
Tiene que estar en la carretera por si entra un aviso.
A veces no puede volver, pero yo le guardo la cena.
Se la guardo en el horno y se la caliento cuando llega.
Simón no me miente.
Nuestros padres murieron.
Las carreteras son malas.
pero aquí se está bien.
Aunque... los políticos
no se gastan nada en arreglarlas,
(LLORANDO) se lo meten todo en los bolsillos.
Mi Simón no me mentía.
En cuanto sepamos algo, lo diremos. -¿Diréis qué? ¿Qué vais a decir?
(HABLAN VARIOS A LA VEZ)
(CONVERSACIÓN ACALORADA)
Quedaros tranquilos...
Hemos conseguido controlar la hipertensión intracraneal.
pero, en cuanto despierte de la anestesia, os avisaremos.
Podéis estar tranquilos, de verdad. La cirugía ha ido muy bien.
Podéis ir a la cafetería a tomar algo o incluso iros a casa a descansar.
Todavía le quedan unas horas. Si hay cualquier novedad, os avisaremos.
Todavía es muy pronto para decirlo.
Sí. Si me disculpáis...
No se ha movido de la casa.
Los guardias han estado registrando, pero hace un rato que se han ido.
A la "muller" ni se la han llevado al cuartelillo.
-¿Tampoco están los de la UCO? -No.
-¿Los conocías?
Al matrimonio, digo. -No son del valle.
Bueno, él trabajaba con la grúa. Alguna vez me lo habré cruzado.
Pero nunca salían de la casa, sobre todo la "muller".
La Teresa dice que es retrasada.
-(FARFULLA)
Quiero verla. -Sabes que no puede ser, Joaquín.
¡Déjalo pasar, a ver si habla de una vez!
-¿Qué habéis hecho con la niña? -¡La pobre niña!
-¡Que salga! -Venga, alejaos.
Vamos a tener la tarde en paz, por favor.
-¡Asquerosos! -¡No merece tanto cuidado!
-La tonta se está riendo de nosotros. ¡Esa sí que sabe dónde está la niña!
-¡Que salga! ¿Qué le ha hecho a Lucía?
-Está protegiendo al cerdo del marido.
-¡Cerdo! -¡Sinvergüenza!
-¡Vamos! -¡Asquerosos!
Buenos días, princesa. ¿Cómo estás?
Señorita, mi Simón no me mentía.
No me mentía.
-¡Cerdo! -¡Sinvergüenza!
-¿Dónde se ha escondido? -¡Vamos!
-Vale ya, ¿eh? Si no, te voy a tener que detener.
-Gracias.
-¡Hagan el favor!
-Cariño, Ana ha despertado.
-Marcela ha llamado a Joaquín.
La niña está en la habitación con los guardias, despierta.
Van a encontrar a Lucía, ¿verdad?
-Claro que sí.
Poco.
Tiene que estar bien ella.
Ella se quedó en el agujero.
(Cristal roto)
-¿Dónde está la niña? ¡Trae a Lucía!
-¡Puta idiota! ¡Sal de ahí, no te escondas!
(Muchedumbre iracunda)
¡Que salga!
La montaña.
-¡Hagan el favor! ¡Que no! -¡Sacadlos!
¿Qué?
Él... Él no me hizo nada.
Él me sacó... del agujero.
El hombre del coche. Él me encontró.
No pudo coger a Lucía porque ella estaba dentro.
(MÓVIL) "-¡Iros de aquí! (MÓVIL) -Señorita,
Simón no me mentía. No me mentía."
(Timbre teléfono)
(Timbre móvil)
Sí que quiero.
No lo sé, nunca le he visto la cara.
Me duele la cabeza.
Porque llevaba un casco.
Un casco negro.
En cuanto sea posible.
(Móvil)
(GAIZKA) "¿Qué? ¿Cómo va todo? He oído que Ana está bien."
"Tranquilo, ahora vas a pasar todo el tiempo del mundo con ella.
¿Necesitas algo? Ropa, o lo que sea, que estoy en el negocio.
He venido a por material para una ruta."
"OK, en un rato voy a verte."
(ANA) Le tapa la cara."
Tiene un cristal negro.
Y agujeros en la barbilla.
(SOLLOZA)
Me duele la cabeza.
Lucía está sola.
(Marcación telefónica)
(PILAR) "Señorita, Simón no me mentía.
¡No me mentía!"
(Música dramática)
¿Te has cambiado el pelo?
(LLORAN)
(Golpeteo rítmico)
(Canción folclórica)
¿Saben si la Guardia Civil tiene ya un sospechoso?
-No nos comentan gran cosa, pero yo tengo uno.
-¡Se acabo el circo!
-Son como alimañas.
(Grito agudo)
(Grito agudo)
Era un gigante. Un día conoció a una joven pastorcilla y...
se enamoró de ella.
-¿Y papá?
Aquí la gente le tiene más respeto a la montaña que a Dios.
¿Saben algo de tu hermana? -Que está muerta.
Aquí en Monteperdido no te van a faltar.
-Sabes que puedes pedirme lo que quieras.
-Te voy a llevar a casa.