Albóndigas de garbanzo y remolacha

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Albóndigas de garbanzo y remolacha

Sabéis que en el programa siempre os decimos que en España tenemos que comer más legumbres. Son un alimento fantástico, rico en multitud de nutrientes y que nos ayudan a llevar una vida más saludable. Por ejemplo, suponen un gran aporte de proteínas, vitaminas, minerales, además de mucha fibra. Pero por si había alguna duda, no hace falta comerlas en los platos de siempre como los típicos guisos, también puedes disfrutar de una gran variedad de recetas muy originales y encima, saludables, como estas albóndigas de garbanzo y remolacha. Son muy sabrosas, reducimos la cantidad de sal añadiendo muchas especias y hasta imitan la textura y el color de las albóndigas de toda la vida gracias a la remolacha. Un plato que no te dejará indiferente, ¡no te quedes sin probarlo!

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Ingredientes

Preparación

PARA CUATRO PERSONAS (Para las albóndigas): 200 g de garbanzos cocidos 1/2 remolacha cocida 30 g de copos de avena integrales 1 cucharada (de las de café) de salsa de soja 1 cucharada (de las de café) de ajo en polvo 1 cucharada (de las de café) de perejil fresco 1/2 cucharada (de las de café) de pimentón dulce 1/4 cucharada (de las de café) de comino en polvo Para darles forma: harina integral de trigo (Para la salsa): 1 cebolla 1 puerro 2 zanahorias 1 diente de ajo 2 tomates 1 hoja de laurel 150 ml de vino blanco 250 ml de caldo casero de verduras o de agua 1 cucharada sopera rasa de harina integral de trigo

En primer lugar, elaboramos la salsa porque necesitamos tiempo para que las verduritas se pochen en condiciones. Cortamos la cebolla, el puerro, las zanahorias y el diente de ajo en dados muy pequeños o brunoise. Por otro lado, trituramos los tomates ¡sí, sí, enteritos, con piel y todo, aquí no se desaprovecha nada! Cuidamos el bolsillo y nuestra salud porque incorporamos fibra. En una sartén grande, echamos 4 cucharadas soperas de aceite de oliva virgen extra (una cucharada por persona y ración, más o menos) y pochamos todas las verduras a excepción del tomate rallado que reservaremos. Cuando estén muy bien pochadas todas las verduras, incorporamos la cucharada de harina integral. Mezclamos muy bien todo el conjunto durante un par de minutos, subimos el fuego y echamos el vino. Dejamos un par de minutos que evapore el alcohol y añadimos el caldo de verduras. ¡Solo nos queda dejar reducir a fuego muy bajito esta salsa tan rica! Mientras, preparamos las albóndigas. Para ello, solo tenemos que triturar muy bien todos sus ingredientes en una picadora, batidora o robot de cocina. Hacemos bolas con forma de albóndigas y, para que no se nos peguen a las manos ni entre ellas, las enharinamos con harina integral. Marcamos las albóndigas, con mucho cuidado, en la sartén con aceite de oliva y las incorporamos a la salsita. ¡Receta 10, donde comemos legumbres y verduras mientras disfrutamos de lo lindo!