El padre de Patricia Aguilar: "Ahora estoy con más fuerzas todavía"
- Un tribunal de Perú condena a 20 años de cárcel a su captor
- La familia aplaude la sentencia, aunque le parece insuficiente
- "Ahora podrá ser juzgado por otros delitos", comenta su abogada
- Toda la información en la página web de 'La Mañana'
“Ahora estoy con más fuerzas todavía”, ha declarado Alberto, el padre de Patricia Aguilar, durante su intervención en el programa ‘La Mañana’. Una frase corta que sin embargo resume el estado de ánimo en el que se encuentra la familia de la joven. El progenitor ha concedido una entrevista al magacín matinal pocas horas después de que se diera a conocer la sentencia por la que se condena al captor de su hija a 20 años de cárcel.
La sentencia emitida por un juzgado señala que Félix Steven Manrique retuvo y explotó a sus víctimas “tanto sexual como laboralmente”. En el caso concreto de la joven alicantina, queda acreditado que la captó a través de internet valiéndose de la persuasión cuando ella tenía 16 años. Además de Patricia también fueron captadas otras cuatro mujeres peruanas.
“Estoy contento por la sentencia pero nos parece poco”, añade Alberto durante su entrevista telefónica en directo. Desde el plató del programa estaba muy atenta a sus palabras Maite Rojas, la abogada de la familia. La letrada ha aplaudido la sentencia. También ha añadido que gracias a esta resolución se puede abrir la puerta a que Manrique sea condenado por otros delitos como explotación de menores o pornografía infantil. “Si no lo condenaban antes del miércoles lo ponían en libertad porque los plazos de la prisión preventiva se agotaban”, ha apuntado.
El documento emitido por el juzgado señala que Manrique hizo creer a Patricia que su identidad era la del Príncipe Gurdeff, salvador del mundo. Le hizo creer gracias a su compañía podría salvarse de un hipotético fin del mundo, y que para obtener la salvación era necesario mantener encuentros carnales con él. La sentencia especifica que el condenado mantuvo relaciones sexuales con Aguilar desde la primera noche que llegó a Lima.
El condenado mantuvo retenida a la joven en deplorables condiciones durante un año y medio. Ese fue el tiempo que pasó hasta que su padre y la Policía la rescataron de la selva junto a la hija que había tenido con su captor. Para Rojas todo el mérito de este desenlace lo tiene la familia y en especial Noelia, la prima de Patricia que hizo todo lo posible para demostrar la culpabilidad del condenado.
