La despedida de Águila Roja: los cinco mejores momentos
- El héroe se ha despedido de los aguiluchos para siempre después de 116 capítulos
- Recopilamos los cinco mejores momentos del desenlace de 'Águila Roja'
La dirección de esta página ha sido copiada en su portapapeles
La serie de La 1 y Globomedia 'Águila Roja' se ha despedido este jueves con su capítulo 116, repleto de emociones y momentos que los aguiluchos recordarán para siempre. Comentado en las redes como #ÁguilaRojaFinal, el episodio ha cerrado prácticamente todas las tramas que conocimos hace ya siete años, cuando se estrenó la ficción el 19 de febrero de 2009.
Los fans de los finales felices pueden estar satisfechos, ya que tras la reaparición de Margarita, Gonzalo consigue por fin que le perdone, y consiguen huir juntos con Sátur y Alonso para instalarse en algún lugar donde empezar una nueva y feliz vida. Por su parte, el 'lado oscuro' también permanece unido, con una Lucrecia y un Hernán que retoman su lado más romántico y deciden fugarse muy lejos, pero juntos.
Sátur, eterno
Uno de los momentos de mayor tensión, si no el más tenso, es cuando Sátur parece no resistir la operación improvisada de su amo para extraerle la bala que Alonso le ha disparado inconscientemente y le vemos llegando a un supuesto cielo, donde puede pedirle perdón a Cipri por lo mal que se ha portado con él los últimos días. Todos los aguiluchos respiramos tranquilos cuando el criado vuelve a dar señales de vida. Se había ido un minuto y ya le echábamos de menos.
El amor de tu vida es el héroe de la Villa
Por fin, Margarita se entera -como el resto de la Villa, por Anaís- de que el maestro, el amor de su vida, es también el Águila Roja. En cuanto tiene un tiempo a solas se pone a recordar los momentos que ha vivido con el héroe y reflexiona cómo no se pudo haber dado cuenta. ¿Podrías ser más perfecto, Gonzalo de Montalvo?, habrá pensado, resignada.
Los hijos del rey huyen
Entre que uno ha intentado arrebatarle el trono con la ayuda de los franceses y el otro le ha puesto la catana al cuello y ha estado a punto de asesinarle en venganza por Laura de Montignac, el rey Felipe IV ordena que ejecuten a sus dos hijos en la plaza, ante todo el barrio de San Felipe. Malasangre, entre el público, decide no quedarse de brazos cruzados y abre fuego contra los guardias, pero acaba siendo asesinado. Quizás este pequeño halo de esperanza es el que empuja al héroe a librarse de las cadenas con todas sus fuerzas y a salvar a, ni más ni menos, su malvado hermano, el Comisario.
Cuando parece que la escena no puede ser más emocionante, aparece Margarita a caballo y se lleva el héroe. La princesa es quien rescata al príncipe en esta ocasión. Se lo debía, ¿no?
El odio mueve montañas
O al menos en el caso de Hernán y Lucrecia, que después de vengarse del Cardenal Mendoza -la Marquesa llega antes y se gana ese placer-, se echan en cara todo lo que se odian, lo horrible que ha sido para sus vidas cruzarse en el camino y... deciden continuar el camino juntos. El 'lado oscuro' vuelve a sus orígenes y deja atrás todo el resentimiento y la venganza que Hernán ha profesado a la Marquesa durante toda esta novena y última temporada.
Y comieron perdices
Margarita y Gonzalo se casan, por fin. La costurera le confiesa al maestro lo que Sátur le había contado horas antes: están esperando un hijo. Y es precisamente el criado el que se da cuenta de que hay que celebrar la ceremonia cuanto antes, no vaya a suceder algo de nuevo. Después de pasar por la capilla, el matrimonio, Sátur y Alonso huyen juntos, lejos de la Villa, para ser muy felices.
