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La curiosidades del capítulo 3 de El Ministerio del Tiempo

¿Buscaron los nazis el Santo Grial en España?

  • Henrich Himmler dirigía las SS y también buscaba reliquias a las que la tradición atribuía poderes sobrenaturales
  • ¿Qué buscó en Montserrat? ¿Cómo le recibieron los monjes?
  • ¿Qué hubiera pasado si hubiera encontrado una puerta del tiempo?

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El Ministerio del Tiempo - ¿Buscaron los nazis el Santo Grial en España?

Lo mejor de El Ministerio del Tiempo es poder cruzar una puerta y vivir un momento histórico que has estudiado en los libros de texto. Gracias a los guiones de Javier Olivares, nos hemos colado en el tren de Hendaya en el que Hitler y Franco negociaron la participación de España en la Segunda Guerra Mundial. Y también hemos seguido los pasos de Himmler en Montserrat ¿Qué vino a buscar la mano derecha del Fhürer?

Los nazis buscaron el Santo Grial

Aunque en el tercer capítulo del MDT lo hemos visto muy interesado en girar el pomo de las puertas del tiempo, lo cierto es que cuando Himmler vino a España se interesó por Santo Grial

El jefe de las SS también dirigía Ahnenerbe. Algo así como una sociedad que buscaba la herencia ancestral alemana, es decir, intentaba demostrar que la raza aria era superior.

"Envió expediciones a todo el mundo en busca de todo tipo de objetos de poder y de esos orígenes de la raza." Óscar Herradón, autor de Los magos de la guerra y redactor jefe de la revista Enigmas, ha estudiado a fondo el ocultismo en el Reich y asegura que Himmler estaba obsesionado "con mitos que no eran más que leyendas".

Eduardo González Calleja es profesor de Historia en la Universidad Carlos III y cree que Himmler tenía otras prioridades: "Los intereses de las SS van en otro sentido. Es sobre todo una orden policial paramilitar que se ocupa de la represión en las zonas ocupadas. Los asuntos de carácter esotérico encierran una actividad muy secundaria."

"Las SS comandadas por Himmler llegaron a buscar la Lanza del Destino." Asegura Herradón. Primero lo buscaron en el Laguedoc francés y después, el propio Himmler, en la Abadía de Montserrat en Barcelona.

"No es que fuese una búsqueda al estilo de Indiana Jones", puntualiza Calleja. "Lo que sí sucede es que Hitler muestra interés por la Lanza de Longinos " El profesor de Historia se aleja de la opinión de Herradón cuando termina sentenciando que "no es una búsqueda compulsiva ni obsesiva."

Asegura Eduardo González Calleja que el objetivo de la visita de Himmler a España era concretar las condiciones de la reunión que tendría lugar entre Franco y Hitler en Hendaya y estrechar los lazos que unían a las dos naciones. Óscar Herradón cree que "Hitler, dentro de sus delirios místicos, pensaba que haciéndose con objetos a los que la tradición atribuía un poder sobrenatural, podía utilizarlos en su lucha contra los aliados, el judaísmo y contra todos los enemigos del Reich."

González Calleja sigue insistiendo en que era una actividad muy secundaria. Y más en este viaje a España: "Fue una visita tan rápida, tan llena de actos protocolarios que van desde una corrida de toros, hasta reuniones con los directores de la policía española, que fue imposible. Además Montserrat fue una visita de muy pocas horas."

Los monjes de Montserrat no querían a los nazis en su abadía

En este punto sí que coinciden los dos expertos a los que hemos consultado. Herradón nos cuenta que el recibimiento no pudo ser más frío, solo dos monjes recibieron a la comitiva alemana: "Los monjes no quisieron que Himmler indagase en la búsqueda que tanto le obsesionaba. No fue echado a patadas, pero no fue muy bien admitido en aquella comunidad. Con lo cual, luego Franco les llamó al orden por haber tratado así a una de las personas más importantes del Tercer Reich."

¿Y si los nazis hubieran encontrado las puertas del tiempo?

Jugamos al qué hubiera pasado si... con Herradón. Por un momento le pedimos que se imagine cómo hubiera sido la historia si realmente Himmler descubre El Ministerio del Tiempo: "No sería alocado pensar que pudieran buscar algún objeto que les permitiera viajar por el tiempo, lo que suena a auténtica locura. Pero lo cierto es que el propio ideario de Henrich Himmler sonaba a locura total y absoluta."