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Las subastas más absurdas: ¿Cuánto pagarías por una chocolatina o por las bragas de Eva Braun?

  • Las bragas de la esposa de Hitler, los mocos de Scarlett Johanson o un Cheeto con forma de gorila, entre las pujas más locas que nos hemos topado
  • Alucina con la cantidades que la gente paga por este tipo de objetos
  • ¿Cuánto estarías dispuesto a pagar por estas cosas?

Por
Eva Braun
Eva Braun

Vuelve la famosa marca de chocolate y han sacado a subasta en Ebay la primera tableta. La puja ya va por 12.500 euros, y como no podía ser de otra forma, ya se ha colado entre las tendencias del día en Twitter España. Todo el mundo está hablando del regreso y del dinero que algunos estarían dispuestos a pagar por la cotizada tableta. Lo llamativo es que la empresa que las produce ya ha confirmado que ésta no va ser la única, y aún así, la gente sigue pujando. ¿Hasta dónde llegará?

Las redes se han volcado con la noticia y el hastag Nestle Jungly está siendo el más comentado por los usuarios de Twitter. Unos súper contentos con la vuelta de la famosa marca, otros no tanto y casi todos atónitos con la puja. Pero ésta no es lo única subasta extraña o ridícula que nos hemos encontrado. A continuación, te mostramos nuestra recopilación con las subastas más locas que hemos visto.

La sudadera del hijo de Beckham

Cruz Beckham, el tercer hijo del famoso exfutbolista, subastó en su momento una sudadera por 150.000 dólares y fue muy criticado por ello. Los usuarios le reclamaban su avaricia y el hecho de que no donase el dinero a alguna organización benéfica. La sudadera en cuestión era un obsequio del diseñador Kim Jones y se trataba de una edición limitada Louis Vuitton x Supreme que salió a la venta en 2017 y que con el paso de los años se ha revalorizado en el mercado.

En cuanto el adolescente publicó en su Instagram la subasta, muchos usuarios no tardaron en dar muestras de su repulsa con comentarios del tipo: “odio a los niños malcriados” o “como si no tuviera suficiente dinero”, además de criticarlo por no hacer una subasta benéfica y querer llevarse él todo el dinero obtenido. Al final Cruz se vió obligado a retirar la publicación.

Un Cheeto con forma de gorila

Esta historia es de lo más curiosa. El aperitivo de maiz alcanzó ese precio gracias a su parecido con el amado gorila Harambe, el animal asesinado a disparos por los cuidadores del zoológico de Cincinnati por haber arrastrado a un niño pequeño que entró en su recinto. Pues unos subastadores lograron vender la fritura por casi 100.000 dolares. La subasta comenzó en 11.99 dólares y terminó con una oferta ganadora de 99 mil 900 dólares.

Un mechón de David Bowie

Por este se pagaron 4000 dólares. ¿Y quién se los llevó? Una trabajadora del famoso museo de cera de Londres le pidió al mismísimo David Bowie un mechón de su cabello para hacer una peluca lo más parecida a su melena y colocarla en su estatua. Al final dicha peluca nunca se hizo y ese cabello que estuvo guardado más de 30 años, fue subastado por 4000 dólares.

Un cálculo renal que vale 20.000 euros

Es lo que ha conseguido William Shatner, más conocido por su papel de Capitán James T. Kirk en Star Trek. El actor ha conseguido que su problema de salud sirviese para ayudar a otras personas. En 2006 subastó una piedrecilla, que le había sido extraída del riñón unos años atrás, por 25.000 dólares. El dinero fue a parar a Habitat for Humanity, una fundación que se dedica a construir casas para los pobres.

Los mocos de Scarlett Johansson

Has leído bien, sí. La actriz, famosa por películas como Match Point, subastó un pañuelo con sus mocos y ganó 631 dólares por ellos. La idea le surgió durante un programa de tv, se le ocurrió poner a la venta en Ebay el pañuelo usado, y después donó el dinero recaudado a la compra de juguetes para los niños más necesitados.

Las bragas usadas de la novia de Hitler

Sabemos que a día de hoy hay todo un negocio montado en torno a la ropa interior usada, lo que no sabíamos es que fuese tan rentable. Unas bragas de seda que pertenecieron a Eva Braun, la esposa de Adolf Hitler, fueron subastadas por la popular casa londinense Phillip Serrell. Las bragas en cuestión alcazaron un precio en la puja que ningún promotor hubiese imaginado jamás. En un inicio, los organizadores del evento le habían dado un valor aproximado de 300 a 450 libras, pero finalmente un coleccionista las compró por 3.225 euros.