¿Un año sin festivales? Un experto dice que no habrá conciertos hasta otoño de 2021

• Lo que se pueda o no hacer dependerá en gran medida de la actuación del Gobierno
• Joaquín Martínez, presidente de la Federación de la Música de España pide una respuesta cuanto antes
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Un experto dice que no habrá conciertos hasta otoño de 2021

Las noticias que tenemos sobre que va a pasar con los festivales de este verano todavía son muy escasas, y es que no hay nada claro. Muchos son los factores que pueden influir en que finalmente se pueden realizar o no. Pero en los últimos días ha habido una opinión que ha destacado por encima del resto. Se trata de Ezequiel Emanuel, director del instituto de transformación sanitaria de la universidad de Pensilvania, quien en una mesa redonda organizada por The New York Times Magazine para hablar del coronavirus ha dicho lo siguiente: "Cuando la gente dice que va a reprogramar una conferencia o una graduación para octubre de 2020, no tengo ni idea de cómo pueden pensar que es una posibilidad plausible. Creo que las reuniones más grandes (conciertos, conferencias, eventos deportivos) van a ser los últimos en volver. Lo más realista es que pensemos en el otoño de 2021 como pronto".

Esta opinión no es absoluta. Como en todos los casos, los expertos suelen tener diferentes opiniones sobre que puede ocurrir con los festivales y demás eventos que reúnen a una gran multitud de gente. En España, una parte importante sino la que más para tomar una decisión es que el Gobierno decida anunciar las medidas restrictivas que pueden acarrear graves consecuencias sobre los festivales. Limitar el aforo de los festivales a la mitad supondría para los mismos perder dinero al organizarlos, ya que la mayoría necesitan cubrir hasta el 80% de sus entradas para cubrir la inversión inicial, algo que haría que no se llegasen a organizar.

Incertidumbre en los festivales

Por ahora, los festivales que estaban programados para mayo se han aplazado o pospuesto, festivales como el Viña Rock o Tomavistas ya han anunciado algo que visto que es muy probable que en mayo continúe el estado de alarma, era de esperar. Junio es el siguiente mes en la lista, y la mayoría de promotores de los principales festivales que se realizan en las fechas comprendidas del 1 de junio al 30 de junio ya están trabajando para mover las fechas a otoño. Con lo que llegamos a julio, mes en el que se organizan más eventos con un mayor número de personas, festivales de los cuales todavía no sabemos nada.

A toda esta incertidumbre hay que sumarle el más que probable cierre de fronteras, que harían que festivales como el Primavera Sound o el FIB, cuyos aforos tienen casi un 50% de presencia extranjera, se viesen obligados a tener que cancelar por falta de aforo. Una parte del puzle que resolvería una incógnita de la ecuación sería la actuación del gobierno, ya que si se decide anunciar unas medidas restrictivas que no permitan la realización de estos festivales, los promotores podrían acogerse a la cláusula de fuerza mayor, lo que les llevaría a cancelar legalmente los contratos con artistas, proveedores, empresas para montar el escenario o empresas de seguridad. Es por este motivo que desde la Federación de la Música de España se está tratando de que el Gobierno de España se posicione en el tema cuanto antes, ya que según afirma Joaquín Martínez, presidente de esta federación, "la situación ya es catastrófica, pero si seguimos sin noticias un mes entero el sector se va a caer".

La única noticia que aclara un poco el panorama nos llega desde la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, quien afirmo el pasado domingo en una entrevista en El País que "hasta que no llegue la vacuna […] las aglomeraciones van a tener limitaciones para mantener la distancia de seguridad". Esta noticia sin duda es una jarra de agua fría para los festivales, ya que hay mucha incertidumbre sobre cuándo puede llegar la vacuna contra el Covid-19. Las mejores previsiones afirman que no será viable para utilizarse hasta el segundo semestre de 2021. Esto deja el futuro de los festivales como una de las incógnitas de supervivencia de este virus que ha llevado a gran parte del mundo al confinamiento.