Mercedes, entre lágrimas, acepta ser testigo de la boda

Finalmente, y ante las presiones de todos, Mercedes acepta ser testigo de José Luis y Victoria. En principio, no debería haber problema en el cambio de última hora, pero el sacerdote sí que necesita hablar con los duques de Miramar ciertas cuestiones. Se trata de dos preguntas que consisten en que ambos dan su consetiemiento para tener ese papel en la ceremonia. "¿Dan ustedes fe de que el matrimonio que se celebrará entre don José Luis Gálvez de Aguirre y doña Victoria Salcedo de la Cruz es un matrimonio libre, sin coacciones y basado en el amor y el respeto?", les pregunta el cura.

Ante tal cuestión, Mercedes se queda sin palabras, pero Bernardo es el encargado de responder que da fe de ello. La otra pregunta, hizo dudar más a la duquesa de Miramar: "¿Bendicen ustedes este matrimonio que sin duda traerá honor y respeto a ambas familias?". Mientras que el Allué responde sin pensárselo, la hermana de Pilara tarda un poco más para finalmente hacerlo: "Lo bendigo, sí".