Sinopsis
En un nuevo intento por hacerle ver a la Salcedo de la Cruz que nada está perdido, el joven se ha presentado de nuevo en sus aposentos, un acto que no ha gustado a Bárbara: "¿No comprende que vernos solo puede hacernos daño?". Sin embargo, verla es lo único que ayuda al capataz a soportar todo lo que está pasando.
"Escúcheme, se lo suplico", comienza diciéndole para continuar animándola: "Creo que se está rindiendo demasiado rápido, nadie nos ha vencido. Yo todavía puedo luchar, tengo fuerzas. Puedo luchar por los dos si usted no encuentra el ánimo". Para Bárbara no hay nada por lo que luchar, y cree que su amor está acabado, pero Leonardo la corrige: "Se equivoca. Míreme a los ojos. Todavía estoy dispuesto a romper con todo. Ahora he aprendido un oficio, podría buscar colocación en otras tierras", le dice, proponiéndole huir de Valle Salvaje.
"No pienso consentir que tenga una vida desgraciada solo porque quiera estar conmigo", responde muy seria la hermana de Adriana, rechazando así escapar para vivir su amor. Sin embargo, para Leonardo será desgraciado si no la tiene a su lado.
"Lo siento, no puedo continuar. Es que ya no te amo, ya no", termina diciéndole Bárbara entre lágrimas, pidiéndole que se marche de su alcoba, y dejando a Leonardo completamente roto. ¿Cómo terminará esta historia? ¡No te pierdas los próximos capítulos de Valle Salvaje para descubrirlo!
