El beso de la pareja que descubre su amor a Victoria

Adriana le echa en cara a Rafael si su forma de luchar por su amor es pidiéndole a Úrsula que despose con él, para acto seguido, animarle a casarse con ella: "Es lo que esperan de ti. Hazlo. Entonces los Gálvez de Aguirre seguiréis unidos, y bien avenidos, y yo, bendigo esa unión. Espero que seáis muy felices". Sin creer que está hablando en serio, Rafael no sabe qué decir ante los reproches de su amada, que le confirma que finalmente sí asistirá a su boda con su prima: "Yo no pienso dejarte solo", dice haciendo referencia a que él no estuvo cuando la obligaron a casarse con Julio.

La joven hace el amago de marcharse mientras sigue reprochándole a Rafael su particular forma que ha tenido de luchar por ella, hasta que el Gálvez de Aguirre calla sus palabras con un beso. Adriana le pide que no se hagan más daño, pero el hijo del duque no puede contenerse a lo que siente por ella y continúa besándola sin saber que alguien los observa desde fuera a través de una ventana: Victoria.

"Sabe Dios que por mucho que lo intente no voy a dejar de amarte nunca", le dice Rafael a Adriana ante los ojos de una futura duquesa de Valle Salvaje que queda completamente en shock al descubrir la relación que su sobrina y el hijo de José Luis mantienen en secreto. Y justo el día antes de su boda.