El PSOE resta importancia a los mensajes entre Sánchez y Ábalos aunque ve "muy grave" su filtración

Sobre los mensajes filtrados que mantuvieron hace tiempo el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el exministro de Transportes, José Luis Ábalos, la dirección socialista habla de chascarrillos de hace cuatro años sin trascendencia pública.

El ministro para la Transición Digital, Óscar López, ha calificado de "muy grave" la filtración de conversaciones privadas. Para la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, el asunto no tiene "nada que ver" con los procesos judiciales que se investigan.

Por ahora, Ferraz no denunciará la filtración y confía en que sea el juez quien lo investigue de oficio. En el intercambio de dichos mensajes se confirma algo que ya se sabía: la mala relación entre Sánchez y algunos barones del PSOE. En ellos, Sánchez califica de "vomitiva" una entrevista de García Page y pide a Ábalos que le diga que "deje de tocar los cojones".