Uno de cada diez españoles planean pedir un préstamo para costearse las vacaciones de verano

Las vacaciones de verano son de las fechas más destacadas para los trabajadores, pero escapar de la rutina y cambiar de aires no es barato. Además, no todos disponen de liquidez para poder costearse el descanso. El 30% de los españoles se plantea financiar el verano y al menos uno de cada diez se lanza a pedir un préstamo.

El director de educación financiera del Instituto de Estudios Financieros, Jordi Martínez Llorente, afirma que "es una cifra alta y viene a indicar las dificultades para llegar a fin de mes o para ahorrar de buen parte de la población".

Aquellos que opten por gastar el dinero que tienen, la opción menos mala es el crédito al consumo, porque tirar de tarjeta y generar un descubierto es poco recomendable. La portavoz del comparador web Kelisto, Estefanía González, destaca que "los intereses que nos cobra el banco, la media para una operación como las vacaciones de verano para un préstamo personal", ascienden hasta el 11% "de media aproximadamente". Por otro lado, afirma la portavoz, que las tarjetas de crédito salen más caras aún con un interés medio de 18% o 19%.

Llorente, por su parte, explica que "si pedimos un crédito para vacaciones, por ejemplo a un año, nos podemos encontrar en febrero que tenemos que pagar la calefacción y tenemos menos dinero porque estamos todavía pagando el crédito de aquellas vacaciones que hicimos en verano".

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