Sinopsis
El presidente del PNV, Aitor Esteban, ha sostenido que está de acuerdo con el "grueso" del proyecto de ley para reducir la jornada laboral, pero ha señalado que presentaría enmiendas parciales porque no puede ser "un café para todos" porque hay "riesgo" de que haya comercios, sobre todo pequeños, que puedan cerrar.
En una entrevista en La Hora de La 1, se ha referido este miércoles a este asunto, justo el día en el que llega al Congreso, donde salvo sorpresa, decaerá por los votos de PP, Vox y Junts.
Sobre la negociación de los Presupuestos Generales del Estado, Esteban ha admitido que no es "optimista", aunque su grupo trabajará por que salga adelante. "Queremos ser leales con el Gobierno, pero el Gobierno tiene que responder", ha advertido. En este punto, ha criticado a los partidos de la investidura que ahora no apoyan al Ejecutivo. "Si se le da la confianza a un Gobierno, hay que darle al menos un presupuesto, pero hay partidos que no han tenido claro ni eso", ha defendido.
Por otro lado, se ha referido también a la apertura de juicio oral al fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz. Al respecto, ha reconocido que le ha sorprendido la fianza impuesta cuando "tampoco hay unos indicios muy claros evidentes de que haya una culpabilidad directa". Además, ha advertido de que nadie se acuerda de "cómo comenzó esto, cuál es el origen y quién ha cometido el delito", en alusión a Alberto González Amador, novio de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, que ha sido procesado por fraude fiscal. En este sentido, Esteban ha manifestado que "alrededor" de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, "muchas veces hay tinta de calamar".
En relación a si considera que algunos jueces están haciendo política, ha manifestado que "ideología tiene todo el mundo, y también los jueces y las juezas". "Cuando llevas creyendo que tienes una determinada misión, puede haberlo, claro que lo habido". A su juicio, lo ha habido "siempre", pero ha precisado que "normalmente los grandes partidos del Estado nunca lo han sentido", pero "otros más pequeños sí que ha habido desde luego casos.
