Sinopsis
El senador y exsecretario general del PSOE-M, Juan Lobato, ha comparecido ante los medios para abordar el proceso judicial en curso, enfatizando su compromiso con la transparencia y el acatamiento de las decisiones judiciales. Lobato ha asegurado que su "máxima es colaboración total con la justicia, puesta a disposición de toda la información que sea relevante, porque aquí lo importante es la verdad y la ley." Además, ha hecho un llamamiento al respeto institucional, indicando que el Tribunal Supremo, como responsable de tomar una decisión, debe ser respetado por todos: "Que tome la decisión que tome todos la respetemos y la acatemos."
En cuanto a su actuación personal en este caso, el político madrileño defendió su prudencia inicial al manejar la documentación: "Yo tomé una decisión por criterio de prudencia y para que la verdad estuviera acreditada". Rechazando cualquier papel de víctima, se centró en la necesidad de la verdad y de la pedagogía sobre el cumplimiento de la ley. Además, lamentó que se mezclen diferentes acciones incorrectas: "Me parece una vergüenza que se defraude fiscalmente. Me parece una vergüenza que se dicen bulos y me parece que también es incorrecto que se revelen datos de carácter reservado, lo haya hecho quien lo haya hecho." Insistió en que la cuestión de fondo "no va de unos u otros, va de lo que está bien y de lo que está mal."
Finalmente, Lobato distinguió claramente entre los ámbitos judicial y político, aseverando que en la situación actual se están viendo "tres cosas: la justicia, otra la política y otra la mala política." Subrayó la dificultad de defender el fraude fiscal, que ya está acreditado por la Agencia Tributaria, y reafirmó que su propósito es hacer "pedagogía sobre la buena política". Concluyó que, pese a los intentos de montar una "teoría de la conspiración", su papel principal es "colaborar con la justicia" y denunció que la política "frentista de manipulaciones, de exageraciones y de mentiras" es "muy poco edificante" para el país.
