La industria química de Tarragona tiene el reto mayúsculo de la transición energética. Concretamente, Repsol Química tiene el objetivo de ser neutral en emisiones de carbono el año 2050. Para hacerlo se están investigando diferentes vías: la electrificación y la circularidad. Pero hay una parte de la industria que no se puede descarbonizar. Y que hacer con ese CO2 Una de las propuestas es capturarlo y almacenarlo bajo tierra. Concretamente en el subsuelo marino. De hecho ya se están haciendo sondeos. Desde la industria quieren que Tarragona sea un hub de CO2. Por otro lado, ecologistas, científicos y expertos, rebajan expectativas. Piden precaución y mucho cuidado en un territorio que aún se recupera de la sombra y las consecuencias del proyecto Castor.