Carmen y Begoña, dos novias eternas, que se conocieron en una residencia de Logroño y que han pasado por el altar.
Carmen y Begoña tienen 73 años y se conocieron en una residencia de Logroño. Su historia de amor comenzó en el comedor y ha acabado con ellas casándose y compartiendo habitación. Aseguran que su vida no ha cambiado: "Seguimos demostrándonos el mismo amor, pero ahora es más tierno" dice Carmen. La historia empezó con Carmen que fue quien se fijó en Begoña pero no se atrevía a decirle nada, pero un día Begoña dio el paso: "Estaba esperándome, me senté a su lado y estuvimos 2 horas hablando".
Reconoce que la boda ha sido complicada por la "gran cantidad de papeles" pero gracias a la educadora social han podido sacarlo adelante. Ahora la residencia también va a celebrarles una boda.