Si aplicáramos a rajatabla las medidas del Pacto Verde Europeo en materia de eficiencia energética en nuestras viviendas, el 43 por ciento de nuestro parque de viviendas no pasaría el examen. A partir de 2033 no se podrían vender ni alquilar inmuebles con un certificado inferior a la letras D. De un total de 25, 7 millones de viviendas, ocho de cada 10 tiene una eficiencia mala o muy mala. De los 4.800 millones de euros del Plan de Recuperación Europeo, aprobado tras la pandemia, solo se ha ejecutado el 42 por ciento. Y en junio del año que viene, los fondos Next Generation desaparecen. Algunas comunidades están acelerando ahora, pero ni queda tiempo ni hay suficiente mano de obra. Para lograr la descarbonización en 2050, tendríamos que rehabilitar 71.000 casas al año. Es una cifra impensable, afirma un estudio de los Administradores de fincas, que calculan 600 años para rehabilitar nuestro parque inmobiliario. Sólo el aislamiento de fachadas y las ventanas con rotura de puente térmico permite un ahorro de energía del 70 por ciento en los hogares.