En medio de la confusión sobre las medidas que tomará el gobierno de Castilla y León respecto a las mujeres que quieran interrumpir su embarazo, Javier Martínez-Guisasola, presidente de la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO) en la comunidad, ha explicado en Las Mañanas de RNE que, por el momento, no existe ninguna orden que obligue a las embarazadas o a los sanitarios, pero considera que, en caso de tomarse, "se debe consensuar con los profesionales y ver si tienen base científica". Aunque, a su parecer, se trata de una medida "cruel" para las mujeres. "Me da la impresión de que Vox desconoce el trabajo que hacemos los ginecólogos y las matronas", ha apuntado Martínez-Guisasola, refiriéndose a la labor informativa y al respeto en la toma de decisiones de las embarazadas, y ha indicado que, aunque se desconocen los efectos reales, no es recomendable aplicar herramientas tan potentes como la de las ecografías 4D sobre individuos tan pequeños como un feto.