El Gobierno central y el de Canarias retoman hoy las negociaciones en busca de una solución para los 4.400 menores migrantes que han llegado solos a nuestro país. Elma Saiz, ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, ha manifestado su optimismo en Las mañanas de RNE con Josep Cuní para que se llegue a un acuerdo que de lugar a una modificación "necesaria" del artículo 35 de la Ley de Extranjería, insistiendo en la buena disposición del Gobierno, que "siempre ha tenido la mano tendida" y criticando la actitud de los populares, a los que ha acusado de "hipocresía", y una muestra de que lo único que persiguen es hacer daño al Gobierno "y a los menores no acompañados".
La ministra ha calificado de "ejercicio de responsabilidad" el reciente acuerdo con Junts, que cede a Cataluña las competencias respecto a la gestión de una parte de la política migratoria. Sobre si será el aprendizaje del catalán obligatorio para obtener el permiso de residencia, ha aclarado que "el conocimiento de la lengua no es ni va a ser ningún requisito para expulsar a nadie o denegar la entrada", aunque no ha negado que "la lengua es un instrumento fundamental en la integración". Preguntada sobre las declaraciones de José María Aznar hoy en el diario ABC, asegurando que ese pacto con Junts es más grave que "el golpe de Estado del 17 de octubre", Saiz ha querido recordar que el llamado pacto del Majestic "generó una España de dos velocidades que tuvo que ser revertida por Zapatero con los estatutos de autonomía de segunda generación" y ha pedido al expresidente "coherencia, rigor y más respeto para el conjunto de los españoles". La ministra del ramo también ha defendido la política migratoria del Gobierno, que ha asegurado que "es un ejemplo dentro y fuera de nuestras fronteras".
