El hallazgo casual de un diario de 1936 de una pariente lejana de mi abuela es el punto de partida de esta historia. Sobre todo, una de sus páginas centrales. “El día 27 de agosto ocurrió un suceso corriente en otros pueblos, no en este, por ser pequeño y de poca importancia. Serían las once de la noche cuando llegó un camión y un automóvil con once fascistas forasteros, los que manifestaron a las autoridades que en la carretera de Ceclavín, de la parte de acá de la rivera, habían fusilado a ocho comunistas, entre ellos una mujer. Estas autoridades dispusieron el traslado al cementerio y cuando nos levantamos todo estaba terminado”.
Así, de golpe y casi noventa años después, me enteré de que en el pueblo donde he pasado los veranos y las navidades de mi infancia había una fosa común de la Guerra Civil con ocho personas fusiladas. Sus nombres eran Vicente Lisero Iglesias, Florentino Martín Valiente, Teodoro García Simón, Antonio Alonso, Antonio Hernández, Josefa Mogín Leirado y dos personas más, cuya identidad nunca se supo.
El podcast trata de reconstruir la vida de Josefa Mogín Leirado, la única mujer del grupo, y la búsqueda de sus restos. Las primeras catas llevadas a cabo en 2007 en el cementerio del pueblo no devolvieron respuestas a los familiares, pero una investigación impulsada por el historiador extremeño Julián Chaves abre, de nuevo, la posibilidad de localizar a Josefa y a una veintena más de personas represaliadas por el franquismo en otra fosa situada en Zarza la Mayor, un pueblo vecino en el que se van a reanudar las labores de excavación en una antigua mina de gran profundidad.
Un trabajo de Juanjo Cubero.