¿Alguna vez has sentido que te fuiste demasiado lejos? Demasiado lejos para llegar a tiempo... a la distancia exacta en la que pensabas que estaba un sueño, tu vida, el camino que querías recorrer y que te ha hecho dejar atrás algo o alguien sin darte cuenta. Y duele. Duele la culpa de no haber estado, de no haber llegado, de no decir lo suficiente. Duele mirar atrás y preguntarte: ¿y si me hubiera quedado?
Pero el amor no se mide en los centímetros que nos separan. No importa lo lejos que te hayas ido: lo que está, está. Los que están, están. En los gestos que repetimos sin pensar, en esa canción tarareada, en la manera en la que el viento nos golpea la cara y de repente: están ahí. Estamos ahí. No solo en el recuerdo, sino en todo, en todos los que nos atraviesan y a los que también nosotros habitamos.
Del duelo y la culpa, de amor, de soledad, de elegir la forma en la que quieres vivir y tener dudas, de equivocarse y perdonar, de abrazos... de todo eso hablamos hoy en El cine que viene y lo hacemos a través de 'Lo que queda de ti', ópera prima de Gala Gracia.
