Ecologista, feminista y espiritual. Pitágoras fue un adelantado a su tiempo, un hombre que dejó huella no sólo en las matemáticas o la geometría; también en la astronomía o la música. Marcó a dos grandes como Platón o Aristóteles y fue capaz de explicar la armonía de las esferas y la música celestial. En su tiempo, tal y como nos cuenta David Hernández de la Fuente, se le otorgó una suerte de halo especial místico. Se cuenta que incluso entendía el lenguaje de los animales. Desde luego, a Pitágoras no se le puede reclamar falta de empatía con el otro.
Y de eso nos viene a hablar esta vez Vico. Nuestro pensador sevillano nos recuerda cómo nacemos con empatía y cómo podemos perderla en caso de no practicarla. Por eso, defiende el filósofo, el contacto social en la infancia es tan importante. "Más parques y menos pantallas" sería un buen resumen de su pensamiento.
Recibimos con los brazos abiertos a una psicóloga joven, comprometida y, desde luego, empática con el mundo que le rodea. María Gómez llega con la "Filosofía de la Ventana Rota" bajo el brazo, un experimento social controvertido que demostró cómo las señales de deterioro en la ciudad influyen en un comportamiento social delictivo. María lo aplica al acoso escolar y al maltrato en pareja. "No hay que dejar pasar las primeras señales, lo que parece pequeño, porque después se normaliza y es más difícil cambiarlo", cuenta.