(Música)

(RÍE)

(A LA VEZ) ¡Vera!

# Es Vera. # ¡Vera!

# Vera. # Vera.

# Con deseos para ti y para mí. # Ella es genial.

# Vera y el Reino Arcoíris. #

"DÍA DE LA AMISTAD"

Vale, allá voy.

Bartleby hace un saque magistral y el juego de pelota lenta

del Día De la Amistad comienza. (RÍE)

Oh, Vera la devuelve con un gran golpe espiral.

Excelente elevación.

¡Mía!

Espera...

Sigue esperando...

A esto lo llamo el megagiro de cola a cámara lenta.

¡Ah!

(RÍE) Buen movimiento, Bartleby.

¡Ah! ¿A dónde ha ido?

Oh.

Vale, no hay problema, cogeré la pelota

sin mojarme nada en el intento.

(HACE ESFUERZOS)

Venga ya, pelota, ven con Bartleby.

¡Ah!

Siento tirarte de la cola, By, pero creí que era una emergencia.

Lo era, casi me mojo,

pero tú no dejarías que eso pasara, ¿verdad, Vera?

Bueno...

No en el Día de la Amistad.

¿Grizelda?

¡Tachán!

Venimos a dar brillo al Día de la Amistad.

Ya veo que lo has conseguido.

¿Llevas regulador de intensidad?

Ahora que ya estamos todos, tengo algo que enseñarnos.

¡Vamos!

(Música)

Como es el Día de la Amistad os he hecho pulseras de la amistad.

¿Regalos?

Gracias, Vera, qué detalle por tu parte.

Guay, y vamos a juego.

Nadie me dijo que se hacían regalos el Día de la Amistad.

Os habría traído unos regalos geniales.

No hace falta.

Es que me apetecía hacer pulseras para mis amigos.

Y hay muchas formas de demostrar tu cariño en este día.

Como compartir galletas de bayas ñamñam.

¿Quieres una?

Oh, genial, encima compartimos.

Los amigos se cuidan mutuamente, como cuando Vera evitó

que me cayera al agua.

Toma, Fruky.

Pero no tengo regalos o galletas

ni he salvado a nadie.

No he tenido ningún detalle.

¿Cuándo me toca a mí ser buena?

Bueno, no habría Día de la Amistad sin ti.

Siempre estás ahí cuando te necesitamos.

Se me da bien aparecer en los sitios.

¡Ah! Un pinzas.

Quitádmelo. Vera, quítamelo.

Tranquila, no te muevas, yo lo cojo.

¡Ay!

Vale, un momento, tiene que haber otra forma

de quitarse de encima a un pinzas.

Ay, date prisa.

Bua, las pinzas atacan nuestra comida,

ponedla a salvo.

Fuera, fuera, quita.

¡Oh!

Fruky, cuidado, un pinzas quiere quitarte tu bonito pañuelo.

-¿Ah?

Oh, oh. ¡Ah!

¡Eh! Los pinzas se están llevando nuestros accesorios.

¿Desde cuándo a los pinzas les importa la moda?

No sé, pero les gusta lo brillante.

De hecho, cuenta la leyenda que hay un pinzón gigante

con una cueva llena de tesoros gigantes.

Entonces, si a los pinzas les gusta las cosas que brillan...

Toma, pinzas.

¿Lo quieres?

Problema resuelto. ¡Ay!

Mi ha salvado, Vera.

Oh, me has salvado y has sacrificado tu pulsera,

qué gran amiga eres. ¡Ay!

No ha sido nada, me importabas tú.

Seré tan buena como tú, ya lo verás.

Conseguiré devolverte la pulsera.

Quietos, dadme la pulsera de Vera.

Sí, y mis gafas.

Las galletas de bayas ñamñam no van tan bien como mis gafas,

pero están ricas.

(Música)

Volved aquí, pequeñas pinzas.

Nos estáis fastidiando el día.

Ser una gran amiga no es tan fácil.

Puedo hacer una pulsera nueva para Vera, incluso mejor.

Hecha con conchas brillantes y superespeciales elegidas por mí.

(Música)

(LADRA)

-Paciencia, Frukicito, jugaremos cuando termine

de ser detallista.

Tachán, terminada.

¿No es una preciosidad?

Claro que sí.

Oh, oye.

Oh...

Tú debes de ser el pinzón gigante que colecciona cosas brillantes.

(BALBUCEA)

-Mira, entiendo que te gusten las cosas brillantes,

pero dame mi pulsera, por favor.

Oye, devuélvemela.

(RÍE)

-Que no es un juguete, la hice para una amiga.

-Oh.

-¿Qué? No, tú no.

Una princesa no puede ser amiga de un egoísta.

(TARAREA)

-No es justo, no puedo ir tan adentro,

no soy un pez, ¿sabes? (BALBUCEA)

(Música)

¿Qué acabas de hacer?

¿Y por qué noto los pies tan raros? ¡Ah!

Mis pies perfectos de princesa. ¿Cómo voy a estrenar zapatos nuevos?

(Música)

Grizelda debería haber vuelto hace rato.

Vamos a buscarla. No nos será muy difícil,

hasta con seguir el resplandor.

Eh... Eso es el sol, Bartleby.

Ups, hola, señor sol, feliz Día de la Amistad.

Podríamos seguir las huellas de Grizelda por la arena.

Buena idea, Zee.

¡Vamos!

Devuélvemela. (RÍE)

-Ah.

El día no está siendo como pensaba.

Perdona, Fruky, no estoy acostumbrada a tener cola de pez.

(BALBUCEA)

-Espera aquí, Frukicito, ahora vuelvo.

Solo tengo que atrapar al pinzón, recuperar mi pulsera

y hacer que me vuelva a convertir en una princesa

para no tener que pasarme la vida en el mar.

Pim pam pum. Volveré en un plis.

Chaíto.

(Música)

Oh, mirad ese resplandor.

¡Es Grizelda!

Con un pinzón gigante.

La leyenda es verdad.

(RÍE)

(SORPRENDIDOS) ¿Grizelda tiene cola de pez?

(LADRA)

¿Qué ha pasado, Fruky?

¿Es que no ves lo que pasa?

Grizelda prefiere pasar el Día de la Amistad

con un pinzón gigante que con nosotros.

Tranquilo, Fruky, te cuidaremos.

Ay, las cosas que se hacen por amistad.

Grizelda nunca abandonaría a Fruky,

sobre todo, en el Día de la Amistad.

Creo que Grizelda nos necesita.

Tenemos que salvarla.

¿Eh? ¿Qué? ¿Metiéndonos ahí? Sí,

pero como no nos han convertido en peces,

nos harán falta los deseos.

¡Cúmulo!

(Música)

Venga, Fruky, tú también.

Al Árbol de los Deseos, por favor.

(Música)

(BALBUCEAN)

Igualmente, deseos, feliz Día de la Amistad,

pero no hay tiempo que perder, una amiga nos necesita.

Vale, sentémonos...

y vamos a pensar.

(INSPIRAN Y ESPIRAN)

Bien, Vera, ¿cómo puede ayudarte el Árbol de los Deseos?

Verás, creemos que un pinzón gigante ha convertido a Grizelda en una...

En una sirena brilli brilli.

Necesito un deseo que lo deshaga y que devuelva a Grizelda

a su estado normal.

Y como se encuentra bajo el mar, me hace falta un deseo

que permita viajar bajo el agua.

Es el Día de la Amistad, ayudaremos todos.

(LADRA)

Me parece bien, mientras yo no me moje...

De acuerdo, necesito un deseo que nos lleve a todos bajo el agua.

(Música)

El Árbol de los Deseos te ha escuchado, Vera,

ha llegado la hora de tus tres deseos.

Estoy lista.

(INSPIRAN Y ESPIRAN)

Árbol de los Deseos, Árbol de los Deseos,

por favor, concédeme lo que quiero.

(RÍEN)

# Árbol de los Deseos, escúchame,

# dame deseos, un, dos, tres.

# Árbol de los Deseos, escúchame,

# con tu magia concédeme...

(BALBUCEAN)

# Con tu magia se me cumplirán. #

(INSPIRAN Y ESPIRAN)

Qué increíble combinación de deseos.

Qué ganas de ver lo que dice la Deseopedia sobre sus poderes.

(Música)

Este es Busín. Hola, Busín.

(BALBUCEA)

Busín es un deseo acuático.

Busín se agrandará tanto como para manteneros secos a todos.

Ay, me gusta. El mejor deseo.

Es perfecto.

Busín nos ayudará a nadar bajo el agua para encontrar a Grizelda.

Busín.

El siguiente es Deshizo.

Saludos, Deshizo. ¡Deshizo!

Este es un deseo reversible que cuando gira al revés sobre algo

lo deshace, pero Deshizo solo se puede usar una vez.

Si este deseo puede devolverle a Grizelda

sus dos piernas de princesa, eso sería más que suficiente.

Y tu último deseo es Medusín.

Medusín ya nos ha ayudado antes, es un deseo muy bueno moviéndose.

Hola otra vez, Medusín.

(RÍE) ¿Qué?

Cosquillas.

No estoy muy segura de cómo nos ayudarás a salvar Grizelda,

pero ya se me ocurrirá.

(BALBUCEA)

Vamos, deseos, en mi mochila meteos.

(Música)

Y ahora vamos a por nuestra amiga Grizelda.

(Música)

Gracias, Árbol de los Deseos, feliz Día de la Amistad.

(Música)

(BALBUCEA)

-Uh.

Uh.

Ay, ¿cómo nadan los peces con estas colas tan blandas?

-Ah. -Perdóname, paso.

(BALBUCEA)

-No te vas a librar de mí tan fácilmente, pinzón.

-Oh.

-Esta cola de pez es supermolesta.

(HACE ESFUERZOS)

-Oh.

-Ah... ¿Gracias?

Bueno, ¿me vas a devolver mi pulsera? (BALBUCEA)

-Ah. Veo que no.

¡Ah!

(Música)

(LADRA)

¡Ah!

Pobrecito, Fruky, añoras a Grizelda, ¿verdad?

No te preocupes, la encontraremos bajo toda esa agua.

¿A que sí, Vera? Pues claro.

Es hora de mi primer deseo.

(Música)

Te elijo a ti, pequeño deseo.

Despierta, Busín, dame lo que quiero.

Hola, Busín, necesitamos ir bajo el agua

para encontrar a Grizelda, ¿puedes ayudarnos?

¡Busín!

(Música)

Todos a bordo.

Bien, Busín, al agua.

Estad atentos por si veis a Grizelda.

Será fácil encontrarla con esa cola tan brillante.

Ah, ahí, la veo, detrás de esa roca.

Por ahí, Busín.

(BALBUCEA)

Mm. No es ella, es un banco de peces.

Todos esos peces tienen la misma cola que Grizelda,

eso no le va a gustar.

Oye, ¿cómo encontraremos a Grizelda si todos tienen colas brillantes?

(LADRA)

Tranquilo, Fruky, Grizelda está por aquí en algún sitio,

la encontraremos.

¿Pero cómo?

No es como seguir sus huellas en la arena.

Cierto, no puede dejar huellas si no tiene pies.

Puede que Grizelda no deje huellas,

pero pinzón sí.

Bien pensado, Vera.

Te lo dije, Fruky.

Vera encontrará a Grizelda muy pronto.

Adelante, Busín, sigue este rastro.

(BALBUCEA) -No es justo.

Sabes que no puedo salir del agua como...

Oh, una cueva increíble.

Tu casa es casi tan chula como mi palacio.

¿Cuántas cosas preciosas y relucientes?

Ah, incluyéndome a mí.

No soy medio pez, soy una preciosa, glamurosa

e increíblemente guapa sirena.

Ojalá pudieran verme mis amigos.

Ay.

Les echo de menos, sobre todo a mi mejor amigo, Fruky.

Y a Zee, a Bartleby, a Vera...

Para ella hice esa preciosa pulsera que tienes.

Ya sabes cómo es la amistad.

(ASIENTE)

(ERUCTA) -Oh.

-Oh, puede que no.

-Oh. -Ah, gracias.

Voy a dársela a Vera por el Día de la Amistad

para que vea que buena amiga soy.

(Música)

(BALBUCEA)

¡Ah!

Oh.

-Ah, oh.

Oh, una perla, es tan bonita...

Adoro todo lo brillante.

Un momento, ¿esa es para mí? (BALBUCEA) -Sí.

-¿Quieres que seamos amigos?

-Sí, sí. Sí, sí, sí.

-¿Lo de perseguirme y esconderte era solo un juego?

-Ajá.

-Pues claro que una princesa y un pinzón pueden ser amigos,

tenemos muchas cosas en común, nos encanta todo lo brillante,

tenemos casas con una decoración monísima.

Ah, la próxima vez puedes venir a la mía.

Mis grizmos nos harán un parque acuático

para que lo decoremos juntos, ¿no suena divertido?

(BALBUCEA)

-Si me vuelves a convertir en una princesa, claro.

-Oh, oh.

Oh, oh.

-Oh, no, ¿dónde está eso que hace magia?

-Ah. -Lo tiene la almeja.

Pinzón, tienes que sacarlo y volver a cambiarme.

(HACE ESFUERZOS)

¡Ah!

(Música)

Oh, no.

(Música acción)

¿Puedes usar tus pinzas para liberarte?

(HACES ESFUERZOS)

-Si mi amiga Vera estuviera aquí, sabría qué hacer.

Tal vez...

¡Vera, ayuda!

(A LA VEZ) ¡Ah!

¿Grizelda?

Ayuda.

Por ahí, Busín. Busín.

(Música)

¡Y mi Frukicito!

Vera, sabía que vendrías a por mí.

Hala, sí que es Grizelda, y es cierto que es medio pez.

No soy medio pez, soy una sirena, muchas gracias.

¿Eso te lo ha hecho ese enorme pinzón?

Sí, pero no me puede cambiar.

No te preocupes, lo desharemos con mi segundo deseo.

(Música)

Te elijo a ti, pequeño deseo.

Despierta, Deshizo. (BALBUCEA)

Dame lo que quiero.

Este deseo puede deshacer lo que te ha hecho pinzón.

¿En serio?

¿Y puedes utilizar tu deseo para deshacer lo que ha liado él solo?

Estaba intentando ayudarme y se quedó enredado.

¿Te ayudaba como un amigo?

Puedes... Sí.

Es que es mi amigo.

Una princesa y un pinzón pueden serlo, ¿sabes?

Grizelda, solo puedo usarlo una vez,

y si Deshizo libera a pinzón, no tendré ningún deseo

para cambiarte.

(Música)

Pues... Ah.

Úsalo para liberar a pinzón.

(SORPRENDIDOS) ¿Cómo?

-Ahora somos amigos, y los amigos siempre están ahí

cuando los necesitas, ¿verdad?

Pero ¿y qué pasa contigo?

Pinzón es quien necesita más ayuda, estoy bien.

Ah, Grizelda, no sé si lo sabes, pero tienes cola de pez.

Es una cola de sirena,

y ser sirena no está tan mal.

Pero tendrías que vivir en el agua.

No me importa, me voy a hacer un parque acuático.

Podría enseñar a Fruky a nadar. (LADRA)

No está hablando en serio.

Grizelda, ¿estás segura? Lo estoy.

Hagámoslo.

Bien, Deshizo, adelante.

Deshizo.

(BALBUCEAN)

(RÍE)

(A LA VEZ) ¡Bien! Muy bien.

Bien hecho, Deshizo.

Ahora vuelve a la mochila. (BALBUCEA)

(Música)

Sabía que podías hacerlo, Vera. Gracias, By.

Grizelda, has sido muy generosa.

¿Estás segura de que no te importa ser medio pez?

Quiero decir, ¿sirena?

Bueno, ha estado bien tener una cola superbrillante

y me estaba acostumbrando a ir nadando.

(LADRANDO)

Pero me encantan mis zapatos y correr con mi pequeño Frukicito.

(LADRA)

Perdona, Grizelda, no creo que mi último deseo

te transforme en una princesa.

(HACE ESFUERZOS)

¿Qué está haciendo pinzón?

¿Qué le pasa?

Eso con lo que hace magia está ahí dentro.

¿Su tridente?

¿El que usó para convertirte en sirena?

Claro, pero esa almeja se ha cerrado y no lo quiere devolver.

(Música)

Eso podemos arreglarlo.

Es hora de mi tercer deseo.

(Música)

Te elijo a ti, pequeño deseo.

Despierta, Medusín, dame lo que quiero.

¿Medusín? ¿El deseo de movimiento?

¿Cómo nos ayudará?

¿Recuerdas que Medusín me hizo cosquillas

en el Árbol de los Deseos?

Seguro que unas pocas cosquillas harán que esa almeja enfadada

se relaje.

Eh... Sigo sin pillarlo.

(RÍE)

¿Ves? No puedes reírte con la boca cerrada.

Ay, madre. Así, si la almeja se ríe, se abrirá.

Adelante, Medusín.

Menéate.

(BALBUCEA)

Medusín comienza el juego con un clásico rápido lento rápido.

Oh, la almeja la bloquea. Hoy no va a haber risas.

Medusín está mejorando su táctica.

La almeja lo tiene difícil para ignorar las cosquillas.

Medusín no para, arriba abajo, por todos lados,

y no parece que vaya a parar.

(RÍE)

Vaya, la almeja no puede más. (RÍE)

Y la almeja se ha abierto, señores, se ha abierto.

Ahora rematar depende de pinzón. Allá va.

(BALBUCEA) (AMBOS) Gol.

Conseguido, Medusín. Buen trabajo.

Ahora vuelve a la mochila. Medusín.

(Música)

(BALBUCEA)

Ahora todo depende de pinzón.

(Música)

Ah, vuelvo a tener piernas.

Gracias, pinzón, sabía que podías hacerlo.

Me alegro de tu vuelta, Grizelda.

Y yo de volver a estar con todos mis amigos.

¿Y si volvemos ya a celebrar el Día de la Amistad en la playa?

Aún sigo nervioso por estar bajo el agua.

Un momento.

Pinzón.

Para ti, pinzón, te lo has ganado, amigo mío.

(RÍE)

Gracias por este gran viaje, Busín.

Ahora, vuelve a la mochila.

(BALBUCEA)

Qué Día de la Amistad tan guay.

Nos hemos mantenido unidos como los buenos amigos.

Oh, vale, para.

Somos amigos, lo sé, para ya.

Creo que lo mejor es que Grizelda ha empezado una tradición nueva

para el Día de la Amistad. ¿Ah, sí?

Hacer un amigo nuevo.

Sí, ya sé que yo soy la mejor.

(RÍEN)