Extra, extra, horas extra para nuestro clan.

Entre el tiempo y el espacio, en un punto ideal.

Nunca hay miedo. -¡No!

-Ni células ni átomos de aburrimiento.

¡Big Band Clan!

¡Big Band Clan!

(Música)

¡Eh, eh, eh!

(Música)

Buenos días, alumnas mías de mi escuela.

Buenos días, doña Paca. Como podéis ver,

estoy radiante de alegría. Mirad, mirad.

La-la-la-la. (RÍE)

Os preguntaréis por qué, ¿no? Preguntadlo, preguntadlo.

¿Por qué?

Porque esta semana se celebra el día de la directora.

No conozco ese día. No, yo tampoco,

¿desde cuándo se celebra? Desde hace un minutillo,

que ha sido cuando lo he decidido. Me ha venido la idea así, pum.

Será mañana y será esta misma fecha cada año,

apuntadla en las agendas. ¡Ah! Pues qué bien.

Sí, sí, qué bien, nosotras nos vamos al laboratorio...

No, espere, espere, que aún no he terminado.

Ese día será obligatoria la entrega de ofrendas a la directora,

es decir, yo.

Las alumnos que me entreguen mejores regalos serán recompensados

con un nota sobresaliente en todas las asignaturas de este trimestre

sin necesidad de presentarse a examen.

Doña Paca, ¿esto es legal? Por supuesto, por supuesto,

yo soy la ley y esta ley la ha hecho la ley, es decir, yo,

más legal que esto...

Los alumnos de la hora extra en el laboratorio

sois los primeros en saberlo.

Agradecedme que os dé ventaja para ir pensando los regalos.

Lo anunciaré a bombo y platillo a las nueve

cuando se abran las compuertas de la entrada.

¡Viva el día de la directora! ¡Viva!

(Timbre)

(Música)

Buenos días, alumnas mías y alumnos míos de mi escuela.

(Música)

¿El día de la directora? Sí.

¿Mañana? Mañana.

¿Y hay que hacerle regalos a ese esperpento de mujer?

Los alumnos sí, usted igual se libra.

Esto es de locos, no os preocupéis, hablaré seriamente con doña Paca

para decirle que esto no puede ser. Yo le acompaño, profesor Einstein,

como representante de los alumnos de esta escuela

y con lo bien que le caigo a doña Paca...

¿Estás segura de que le caes bien?

Ana, por favor, mejor que tú seguro.

Y sí, confíe en mí, profesor Einstein, yo le acompaño.

Me parece bien, Marta, pero ahora vamos

a concentrarnos en la ciencia, chicas.

Por cierto, ¿dónde está Leo? En casa, tiene la gripe.

¡Oh, pobre! Pues se va a perder algo increíble

porque hoy es propongo un experimento muy especial.

¿Ah, sí? ¿Con qué nos va a sorprender hoy, profesor Einstein?

¿Nos sumergimos en el maravilloso mundo de la física cuántica?

Nos sumergiremos en el maravilloso mundo de la salsa chimichurri.

Últimamente tengo un hambre...

(Música)

Chuan Lui, ¿dónde estás?

Chuan Lui, eo.

Este se ha largado.

Sí, debe haber salido. Vámonos, ya volveremos más tarde.

Chuan Lui, ¿eres tú? Confiesa.

¿Eres tú? Confiesa, Chuan Lui.

Marta, es un oso de peluche. Sí, ¿verdad?

Ya, es que por un momento había pensado que era

uno de los camuflajes de Chuan Lui.

Chuan Lui hace cosas muy increíbles, pero tampoco te pases, Marta.

Sí, se me ha ido la olla, vamos, vamos.

Hola, chiquilla. Chuan Lui, ¿dónde te habías metido?

Concretamente en esta bolsa de viaje.

Sí, hombre, anda ya, es imposible que tú quepas ahí dentro, Chuan Lui.

Como dijo el gran Maestro. (HABLA JAPONÉS)

No diga imposible si no tiene ni puñetera idea.

Estoy practicando técnicas de contorsionismo,

arte muy útil para los vigilantes de habitaciones secretas.

Perdona, Chuan Lui, pero si no lo veo

no me creo que te hayas metido dentro de esa bolsita.

Pues lo creerás porque lo verás, Ana.

Vamos para allá, ojo al dato.

Primero, vamos a calentar las lorzas.

Es que es muy importante porque si no te puede tirar

aquí un tirón en la rabadilla.

(Música)

Venga.

(Continúa la música)

¿Qué? Lo habéis flipado, ¿eh? Esto está chupado.

(Música)

Doña Paca, no entiendo por qué obliga a los alumnos

a que le hagan regalos a usted.

No tengo por qué dar explicaciones, ni a usted ni a los alumnos.

¿Algo más? No, no.

Yo entiendo que es usted la que manda aquí,

pero doña Paca... Esta escuela es mía,

todo lo que se ve desde la azotea de esta escuela es mío, todo,

edificios, terrenos colindantes, el monte del Santo Pinar

y su pequeña ermita. Mío, mío, mío.

Todo mío.

No, no, no, deja eso.

(Música)

Esto... ¿De qué estábamos hablando?

Del día de la directora, directora. ¡Ah! Sí, eso.

Qué bonito, ¿no? Me encantan este tipo de tradiciones.

Y ahora disculpadme porque no tengo más tiempo para chácharas.

Ya podéis iros retirando y empezar a pensar los regalos.

Perdone, ¿yo también? No, usted no está obligado,

pero los detalles por parte de un hombre

siempre se agradecen.

(Música)

¡Yija! Para nuestra queridísima doña Paca

que la quiero con todo mi corazón, esto va por ti.

¿Qué? ¿Qué os ha aparecido mi regalo para doña Paca?

Seguro que le encanta, a los dictadores

les gustan que le rindan culto. Pelota.

Rastrero. Mentiroso.

Mala persona.

A ver, chicas, solo lo hago para que doña Paca me ponga

sobresaliente y me deje en paz todo el trimestre.

Vosotras me habéis contado que para conseguirlo

hay que hacerle un regalo, ¿no?

Pero ¿tú no te das cuenta que eso es darle la razón?

Claro, claro, claro, claro, escúchame,

no podemos obedecer como borregos a unas órdenes

injustas y desquiciadas que atentan contra los derechos

más básicos del alumnado.

Bravo, Marta.

Me ha salido bien, lo he notado hasta yo.

Tenéis razón, chicas, si le seguimos la corriente a esa loca,

esto cada vez va a ser peor, pero me tenéis que reconocer

que el video ha quedado guai, ¿eh?

Vale, ya lo pillo, no os ha gustado, ¿no?

Okey. No te lo tendremos en cuenta

porque estás con gripe, Leo. Sí, descansa.

Por cierto, un momento.

La chica que te acompañaba en los coros, ¿quién era?

Ah, sí, sí, yo también te lo quería preguntar.

¡Ah! Es mi prima Lorena, estoy tan hecho polvo

que he pensado que un refuerzo al "congo chachiway"

no le iría mal.

Bueno, descansa. Gracias, chicas, chao.

(AMBAS) -Adiós.

(Música)

Tenemos que hacer algo para que el día de la directora

no se vuelva a repetir, ¿se te ocurre alguna idea?

Esta mañana en el despacho de doña Paca

me he dado cuenta de que guarda un secreto

en la caja fuerte que tiene en la mesa.

Deben ser cosas que tienen valor, pero ¿un secreto?

Se le ha caído la caja y se ha tirado por ella como una loca.

Yo se la iba a recoger y me ha empujado para que ni la tocara.

Interesante.

Es feo hurgar en las intimidades de los demás, pero en este caso...

El chantaje estará totalmente justificado, ¿no?

A ver, yo no lo diría así, pero sí, sí, está justificadísimo.

Descubrimos el secreto de doña Paca y si no suprime

el día de la directora, pues lo contamos.

Seguro que Chuan Lui puede ayudarnos.

Por cierto, ¿dónde estará ahora? Chuan Lui, ¿dónde estás?

(Música)

Estoy aquí. Chuan Lui, ¿dónde te habías metido?

En el water closet. ¿Estabas metido en el váter?

No, sentado encima como todo el mundo.

Lo que pasa es es que ayer cené lentejas con chorizo.

Chuan Lui, creo que tus habilidades contorsionistas

podrían ayudarnos mucho.

(Música)

Niñas, niños, alumnado todo, hoy es mi día,

el día de la directora.

En 15 minutos estaré preparada en mi despacho

para recibir vuestras ofrendas que espero que sean

jugosas y de calidad.

Os recuerdo que aquel que me entregue un regalo

que a mi juicio sea extraordinario, será recompensado

con una nota sobresaliente en todas las asignaturas de este trimestre

sin necesidad de presentarse a examen.

Id a buscar los presentes e iros colocando

en estricta fila india entre la puerta de mi despacho.

He dicho.

(Música)

Buenos días, profesor. ¿Qué hace?

Evolucionando una ribozima de ARN para aumentar su eficacia

como catalizador en un factor de 10 000.

(RÍE) Mírale a él que espabilado, la riborcisma dice.

Ribozima, ribozima, si no le importa, doña Paca,

tendría que concentrarme en lo que estoy haciendo.

¿Y ya me ha preparado el regalo?

Me gustaría que el suyo fuera el primero.

¿El regalo?

(Música)

Pero yo no tenía que... Que digo que sí, el regalo,

el regalo, de hecho el experimento que estoy haciendo

es para el regalo, pero claro ahora tardará

porque el regalo... Déjelo, tonto, déjelo,

si con la intención ya me vale.

(Música)

Regáleme un baile.

(Música romántica)

(RÍE)

(Continúa la música)

Gracias y ahora a por los regalos de los alumnos.

¡Viva el día de la directora!

(Música)

Viva.

(Música)

A ver, Chuan Lui, repasamos el plan, te metes en la caja.

Chupado.

Se la entregamos a doña Paca que no podrá deshacer el lazo.

Con lo bestiaja que es, ¿seguro que no va a poder?

Segurísimo, está hecha de material que contiene titanio,

un invento con el que el profesor experimentó hace mucho tiempo,

tengo un montón en casa. Okey, ¿qué más?

Chuan Lui permanecerá en la caja hasta que doña Paca

salga de su despacho, entonces...

Salgo por la parte de abajo, la misma por la que había entrado.

Exacto, abres la caja fuerte de doña Paca,

descubres qué secreto guarda dentro y la obligamos a retirar

el día de la directora.

Amenazándola con hacerlo todo público, me encanta,

yo solo tengo una duda, Chuan Lui, con el contorsionismo

ya me ha quedado claro que eres un crack,

pero ¿tú has abierto nunca una caja fuerte?

El río trae agua y el aguacate verde por dentro es.

¿Qué significa?

Es como respirar contando hasta 10 para no darte una colleja.

Mira, yo por las noches no cuento ovejas,

yo abro cajas fuertes a ver si me entra el sueñecillo.

Mira, este tema, chiquilla, este tema para mí,

para mí está chupado. ¿Vamos allá?

Big. Band.

Clan.

(TODOS) -Big Band Clan.

Venga, vamos a... (GRITA)

Es que antes he hecho unos estiramientos

y me ha dado un poco un tirón en la nalga.

Pero bueno, no pasa nada, voy a utilizar la técnica

del "morrutengo".

(Música)

A ver, José María Trullo, ¿verdad? Entrégame la ofrenda.

Qué horror, por Dios.

Retírate, ya hablaré con tus padres para que te orienten en buen gusto.

Al perrito Marilili le pondría yo este collar.

Retírate, va, retírate. Adelaida Cortés.

(Música)

¿Lentejas? ¿Tengo cara yo de comer lentejas?

Odio, odio las lentejas.

Lentejas, si no las quieres las dejas, pues mira las dejo

y las dejo aquí dentro. Venga, retírate

con celeridad, con celeridad.

Alejandro Gómez.

Pero ¿qué me das aquí, Alejandro? ¿Qué me das?

Pero ¿tú me ves a mí jugando en el despacho con un camión de juguete?

Brum, brum, brum. Esto raya el insulto, Alejandro.

Aléjate de aquí a la velocidad de la luz

que es de 3000, de 300 km...

Bueno, tendrías que saberlo a la edad que tienes.

Venga, aléjate, rápido, aléjate.

(Música)

Hola, Amanda, ¿qué tal? ¿Cómo estás?

Qué bien, cuánto me alegro.

¿Pues aquí? Bua, aquí no muy bien, la verdad.

Te echamos muchísimo de menos, Amanda, eres la mejor directora

que ha habido y que habrá nunca en esta escuela.

No, gracias a ti, la mejor. ¿Doña Paca?

Doña Paca es un monstruo. No, peor.

Mira, ¿sabes qué ha hecho? Te lo cuento.

Ha decidido que hoy es el día de la directora.

Como lo oyes. ¿Y sabes qué?

Que todos los alumnos están obligados a traerle un regalo.

Como lo oyes. ¿Y sabes qué más?

Que se me está insinuando y me ha obligado a bailar con ella

un agarrado por aquí, en el laboratorio.

Que sí, como lo oyes.

Nos está volviendo locos a todos, Amanda.

No tiene idea de nada y esto empieza a parecer,

no sé, un cuartel militar.

En fin, pero sería tan fantástico que pasaras un día por aquí, Amanda.

Pues no sé, para hablar contigo, para vernos

y para pasear juntos por aquí, por el laboratorio, ¿sabes?

Y hacer un pícnic, ¿te acuerdas, Amanda?

Qué tiempos, ¿eh? Bueno y la verdad es

que hasta echo de menos que me llames Unguruchi.

(LLORIQUEA)

¿Me lo puedes decir, por favor?

Gracias, Amanda.

Pues te mando un beso, muac, bueno y otro, muac,

y otro, muac, muac, muac, muac.

Adiós, Amanda.

Pero ¿dónde ves una planta aquí? No tengo, no tengo plantas,

las plantas dan alergia.

La natural y la general da alergia. ¿Qué quieres que con esta regadera?

¿Beber como si fuera un porrón? Largo, largo de mi vista, va.

Ostras, no me gusta nada de lo que me habéis regalado, nada.

Ofrezco un sobresaliente en todas las asignaturas de este trimestre

y solo os pido a cambio un regalo bonito

y ¿así es cómo respondéis a mi generosidad?

¿Con toda esta bazofia? ¿Por qué? ¿Por qué?

Siguiente.

(Música)

Pero ¿esto qué es? Sois dos.

Sí, doña Paca, es un regalo entre las dos.

No, no, esto no es legal, es un regalo por persona.

Falta un regalo aquí.

Es que es un regalo muy valioso. Me importa un bledo, falta uno.

No dijo que estuviera prohibido hacer un regalo entre dos.

Bueno, pues lo digo ahora, está prohibido

hacer un regalo entre dos, ya está, ya es ley.

Verá, doña Paca, nuestra intención era hacerle

un regalo cada una, pero se nos ocurrió

uno muy bonito, muy valioso y muy complicado de construir.

¿Es una construcción?

Empezamos mal porque detesto las manualidades,

especialmente las infantiles.

No es una manualidad, es tan especial que no se puede definir.

Sí, era imposible que pudiera hacerlo una persona sola

y es algo tan increíble y que le va a gustar tanto

que pensamos vale la pena. ¿Y si no me gusta?

¿Y si encima de saltaros la ley a la torera

resulta que no me gusta? ¿Qué hacemos? ¿Me lo contáis?

No, no, es que es imposible que no le guste.

Le va a encantar, seguro, ábralo, por favor.

Vamos a hacer una cosa, si me gusta sortearé

un sobresaliente entre las dos y si no me gusta,

que es lo más probable, tendréis que hacerme un regalo más.

Venga, va, ponedlo encima de la mesa, va.

Es que pesa mucho. Sí y es mejor que esté en el suelo,

si no la importa abrirlo aquí...

Por favor.

(Música)

¿Qué le pasa a este lazo? ¿Por qué no se abre?

Es un lazo de seguridad. Sí, el regalo es tan delicado

que no queríamos arriesgarnos a que lo abriera alguien.

Pero yo sí que tengo que abrirlo.

Venga, ayudadme, hacedlo vosotras, va, va.

Necesitaríamos unas tijeras. Unas tijeras especiales.

No tenga tijeras especiales aquí, ni especiales ni no especiales.

Yo no corto, yo no corto nada.

Para no hacerle perder más el tiempo,

¿por qué no lo abre más tarde? El profesor Einstein tiene de todo,

seguro que si le pide algo para cortar lazos de seguridad...

Bueno, está bien, ya me las arreglaré,

fuera de mi vista, tanto lío para un regalito,

como no me guste... Venga, largo, largo.

Siguiente.

Madre mía, ¿esto qué es?

Por favor, de verdad.

(Música)

¡Ay, Lucio, mi Lucio!

Qué poco gusto que tienen los chicos de hoy en día para los regalos.

peor que el tuyo, que era pésimo.

Cada vez que entro en casa y veo el paragüero me acuerdo de ti.

Ese fue tu regalo por nuestro primer aniversario de bodas.

¿A quién se le ocurre? A ti, solo a ti.

Descansa, descansa en paz que me lo merezco.

Vamos a ver este desastre.

Alejandro, Mariana.

¡Ah, mira!

Solo me queda por abrir el regalo de Ana y Marta.

(Música)

Mi última esperanza.

Hay que reconocer que al menos el lazo es de calidad.

Voy a por las dichosas tijeras al laboratorio.

(Música)

(GRITA)

Vaya pitote que hay aquí montado.

Esto está lleno de cajas, en fin, ¿dónde estará la caja fuerte?

(SILBA) Cajita, cajita, no, no, así no funciona.

Habrá que buscarla con un par, con un par de manitas.

(Música)

(RÍE)

A ver si me sorprendo a mí mismo de la gran efectividad que tengo.

En fin, en fin, lo más importante ya está.

La caja está aquí, abrirla será un pis pas.

(Música)

Pis.

Pas. (GRITA) Cachis, la mar.

Me cachis la mar.

Era una caja de juguete. ¿Y ahora qué?

Habrá que seguir buscando.

(Música)

Doña Paca.

Cuando la burra veas llegar algo tienes que pensar.

¿Qué hago? ¿Qué hago?

Bueno, cajita, llego tu hora, voy a por ti.

(Música tensión)

El pañuelo bordado por mi madre, en paz descanse,

que siempre llevo encima, no lo llevo.

Me lo habré dejado en el laboratorio.

(Música)

El destino, que es muy sabio, me da una segunda oportunidad.

¿Dónde estará la cajita? ¿Dónde estará la cajita?

¿Dónde estará?

¿Dónde está la cajita? ¿Dónde está la cajita?

¿Dónde está la...? (GRITA)

Aquí está, tú sí que eres la auténtica.

Va, va, va, va, va, va.

(Música)

(GRITA) Basta, basta, esto es un desastre.

Basura, basura por todas partes.

No hay ni un regalo que me guste, ni uno.

¡Uy! ¿Y este regalo? No recuerdo haberlo abierto.

Qué flor más fea, por Dios. Hasta aquí, se acabó.

Atención, atención, doña Paca directora de esta escuela al habla.

Os informo que hoy ha sido el primer y último día de la directora.

Vuestra desfachatez, vuestro mal gusto,

vuestra falta de interés y de talento, en general,

ha sido el motor que ha desencadenado

esta triste decisión que me veo obligada a tomar.

(GRITAN)

Por supuesto, este trimestre no habrá ni un sobresaliente, ni uno.

Corto y cierto. Corto y cier...

Cierro y corto. Corto y cierro.

Lo corto... Corto, corto. Adiós.

A la basura todo.

(Música)

Todo.

(Música)

Doña Paca sale del despacho a buscar unas tijeras

y yo me digo, tate, esta es la mía.

Total, que salgo de la caja y veo que el despacho

está todo lleno de cajas, cajas por aquí,

cajas por todas partes. ¿Y la caja fuerte?

Bueno, mi instinto canino me hace encontrarla rápidamente.

Pero era de juguete. -Vaya zasca, ¿y luego qué?

-Luego veo que se acerca doña Paca y yo me camuflo,

así, como un juguete. ¿Y doña Paca no te descubrió?

Pero qué descubrir, descubrir, si yo soy un maestro

del camuflaje, chiquilla. ¿Encontraste la caja fuerte o no?

Espera, no te voy a contar a ti un spoiler.

Va doña Paca otra vez que se ha dejado un pañuelo en el laboratorio,

sale del despacho y allí sí que lo encuentro, la caja.

Bueno, va, cuéntanoslo ya, ¿qué había dentro?

No pude abrirla, morena, no pude.

Estuve cerquita, faltó un segundo.

Pero bueno, tampoco hizo falta porque doña Paca empezó a berrear

que nunca más era el día de la directora.

Total, misión cumplida.

-Sí, ya, pero ¿no os quedáis con las ganas

de saber qué esconde esa mujer en la caja fuerte?

Yo sí, yo me muero de ganas, tenemos que descubrirlo.