Conversamos con el artista Domingo Sánchez Blanco (Salamanca, 1955), mientras presentamos su más reciente trabajo sonoro, editado en disco de vinilo con el título "Ánimo para una miga". En este proyecto Sánchez Blanco se ha rodeado de un gran número de colaboradores (Fernando Castro Flórez -autor de los textos-, Arturo Ledesma, Rosa Hernández Fraile, Roberto Rodríguez, KAOS, David Escanilla, LOODER, Roger Soto, Michel Blinder, Silvia Hernández, Iria Díaz Manzano, YON X, César Serrano, Rubén Casas, Domingo Sánchez Zarza, Manuela Zarza Martín...), como resulta habitual en muchas otras de sus iniciativas, que también rememoramos a través de nuestro diálogo.
Fundador del Espacio de Arte Contemporáneo "El Gallo" y del "Museo Mausoleo" de Morille, Domingo Sánchez Blaco ha presentado su trabajo en instituciones como el Museo de Bellas Artes de San Juan (Puerto Rico), la XI Bienal de Cuenca (Ecuador), el Museo Guggenheim de Bilbao, el Museo del Barrio (Nueva York), el Museo de Arte Contemporáneo de Caracas (Venezuela), el James Joyce Center (Irlanda), entre muchos otros.
Las prácticas de Domingo Sánchez Blanco desafían cualquier definición ortodoxa que intente enclaustrar la creación artística en unos moldes predefinidos. Así, el nuevo trabajo que presentamos en Ars Sonora puede contemplarse igualmente desde la performance o el accionismo, desde la experimentación musical psicodélica, desde el ruidismo de corte punk, desde la elaboración de un objeto artístico -el vinilo que le sirve como soporte se ha editado en una serie limitada de 300 ejemplares-, desde la poesía fonética, desde la provocación...
De manera análoga, los temas evocados durante nuestra conversación con el artista son igualmente múltiples y heteróclitos, y trazan una imprevisible topología en la que la violencia equidista de la docencia, Isidoro Valcárcel Medina equidista de Nick Cave, y el boxeo equidista del museo. Este diálogo nos sirve, junto a otras cosas, en fin, para celebrar la constante e infinita apertura propia de la creación artística, así como para recordar algunos de sus posibles (y a menudo olvidados) elementos clave: el compromiso ético, la amistad, la voluntad de vivir...
