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El gesto de las manos en alto frente a la policía se ha convertido en un símbolo de la herida racial en Estados Unidos. La familia de Michael Brown, el joven negro tiroteado por un policía blanco, dice que el chico estaba haciendo precisamente esto, levantar sus manos para mostrar que estaba desarmado, cuando recibió los disparos mortales.

Un ciudadano negro, cuya identidad no se ha revelado, ha muerto este martes por los disparos de un policía en San Luis, en el estado de Misuri, a pocos kilómetros de la localidad de Ferguson, donde se suceden las protestas por la muerte hace diez días de otro joven negro desarmado tiroteado por un agente.

El levantamiento del toque de queda y la presencia de la Guardia Nacional ha contenido las protestas, mayoritariamente pacíficas, pero aún así se han vuelto a producir enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas de seguridad. El presidente Obama ha enviado a la zona al Fiscal General, Eric Holder y ha llamado a la calma a la minoría causante de los desórdenes.

El presidente estadounidense, Barack Obama, ha señalado este lunes que "no hay excusa" para los "excesos" policiales ni el "vandalismo" en Ferguson (Misuri), y se ha reunido con el Consejo de Seguridad Nacional para tratar la situación tras la muerte de un joven afroamericano en esa ciudad.

La policía brasileña ha dispersado con gases lacrimógenos la primera manifestación contra el Mundial de fútbol Brasil 2014 registrada en Sao Paulo en el día en que comienza la competición, informaron fuentes oficiales. Cerca de 150 hombres de la Unidad de Choque de la Policía Militarizada del estado de Sao Paulo dispersaron a un grupo de 50 manifestantes que intentaban recorrer la avenida Radial Este, la principal vía de acceso al Arena Corinthians, el estadio de Sao Paulo en que se disputará el partido inaugural del Mundial. La policía detuvo a uno de los manifestantes que intentó frenar la marcha de los policías que, en fila, avanzaban con escudos hacia el lugar de la protesta. Hay varios heridos, entre ellos dos periodistas de la CNN. 

En Marruecos, varias asociaciones de derechos humanos acusan a la policía militar de torturas y malos tratos a los inmigrantes subsaharianos en la valla de Melilla. Hasta ahora contaban únicamente con los testimonios de los inmigrantes pero ya aportan como prueba varias imágenes rodadas desde España.