Enlaces accesibilidad
arriba Ir arriba

Merche Berna trabajaba como florista, hasta que hace 8 años le diagnosticaron paraparesia espástica progresiva, una enfermedad neuromuscular con la que cada día tiene las piernas más rígidas. Las limitaciones le han cambiado la vida. Merche lamenta que tuvo que “dejar mi trabajo por incapacidad permanente”, asegura, que también “podía quedar con mis amigas e ir a sitios andando pero ahora mi máxima limitación es andar. Y, si ando más, me tengo que sentar un rato a descansar. También me caía muchas veces y ahora intento no caerme. Lo intento”.