El asesinato de Villavicencio viste de luto la recta final de la campaña presidencial en Ecuador. El domingo 20 de agosto se celebra la primera vuelta. El presidente ha decretado el estado de excepción y la movilización militar para garantizar la seguridad en la calle. No es el primer político asesinado en Ecuador en periodo electoral. El alcalde de Manta, Agustín Intriago, fue tiroteado hace un par de semanas.
El país convive y malvive con una violencia organizada consolidada en motines carcelarios y que ha ganado músculo en la calle. Los homicidios aumentan. Buena parte de ellos, vinculados al narcotráfico, en un país situado entre dos grandes productores de droga, Colombia y Perú, y cuyos puertos son fundamentales para exportarla a Europa. En algunas provincias el narco y las bandas criminales le disputan el poder al Estado. Y sin políticas a largo plazo, dicen los expertos, será difícil ganarles el pulso.
Foto: Imagen de archivo de Fuerzas Armadas ecuatorianas durante un decreto de excepción (EFE/ Marcos Pin)