Cuando la ropa es cultura

• El sari es el vestido más típico para las mujeres
• El kurta ha adquirido mucha popularidad desde los años 60
• En la India es deshonesto que una mujer muestre las piernas, los hombros o el escote

La riqueza de la vestimenta hindú.

Más allá de la arquitectura, la comida o la música, los visitantes de la India pueden conocer este vasto país tan sólo contemplando sus vestimentas. Y, para los más atrevidos, ¡también llevándolas puestas!. Que los tópicos no degraden la realidad: la intensidad de los colores de las ropas, especialmente de las que llevan las mujeres, es deslumbrante.

Telas bordadas, lisas, estampadas y de todo tipo de materiales, desde algodón hasta seda, ofrecen una gama de posibilidades grandiosa. Pero no todo vale. En la India, tradicionalmente, es deshonesto que una mujer muestre las piernas, los hombros o el escote, por lo que los diseños se adaptan a estas normas sociales que se hacen más estrictas en los pueblos.

La tradición de las mujeres indias

El sari es el vestido más típico para las mujeres, una tela de unos seis metros que cubre las piernas con varios pliegues y luego cae sobre uno de los hombros. No obstante, ¡hay hasta 80 maneras de llevarlo!. Debajo del sari, las mujeres indias suelen llevar unas enaguas atadas a la cintura y una blusa ajustada de manga corta por encima del ombligo, conocida como choli o ravika.

Aunque el proceso de ponerse el sari es algo complicado, incluso para aquellas más experimentadas, impresiona ver cómo se les aguanta impecable durante todo el día. A menudo, ellas llevan un bindi en la frente, entre ceja y ceja. Se trata de un punto rojo como señal de auspicio y que a veces se sustituye por una pequeña joya.

El protagonismo del kurta

El kurta ha adquirido mucha popularidad desde los años 60, tanto para hombres como para mujeres, lo que ha supuesto un alivio para muchas que encontraban el sari demasiado incómodo o clásico. El kurta consiste en una túnica o camisa larga abierta con cortes desde la cintura hasta el final de la tela, sobre unos pantalones del mismo color o a conjunto. Hay muchas variaciones del kurta según la zona de la India o las modas.

Por lo general, se llama salwar-kameez a aquel más holgado y largo, mientras que el churidar es una versión más ceñida que suelen llevar las mujeres con una dupatta o pañuelo en armonía con los tonos del resto de la indumentaria.

El atuendo de los hombres

Otras de las prendas más populares para los hombres son el dhoti y el lunghi, que consisten en una tela rectangular de algodón con pocos ornamentos.

Mientras el dhoti va enrollado a la cintura y entre las piernas (tal y como lo llevaba Mahatma Gandhi) y permite obtener unos pantalones ligeros ideales para los lugares más calurosos, el lunghi suele ser más colorido y se pone en forma de falda de tubo.

Los complementos determinan el estatus social

Aunque estas prendas son de uso genérico en toda la India, el tipo de complementos como joyas y bolsos, así como la calidad de las telas, suele revelar algunas diferencias de clase, en una sociedad en la que la jerarquía que marca el estatus social y económico es de gran importancia.

Sin embargo, hay algo bastante universal para indios e indias: el uso de sandalias, apropiadas para un clima caluroso y lluvioso.