Rouco Varela afirma en RNE que espera congregar a "millón y medio de jóvenes" en la Jornada Mundial de la Juventud

• Ha destacado la importancia de la JMJ, que coincide con la visita del Papa a Madrid, para el bien común, para dar a conocer España y para nuestra economía
• Reconoce que "el número de vocaciones ha disminuido mucho" pero ve "un fondo joven de renovación eclesial que cada vez se nota más"
• Crisis económica: "Los pobres no pueden sufrir en sus necesidades más básicas y hay que dar una respuesta"
• Relaciones Iglesia-Estado: "Lo pide que la Iglesia, y básicamente tiene, es libertad para vivir su misión y para que así pueda servir al hombre y a la sociedad"

El presidente de la Conferencia Episcopal Española, el cardenal Antonio Mª Rouco Varela ha destacado la transcendencia que tendrá la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) que acogerá Madrid en agosto y de la que él, como Arzobispo de Madrid, es organizador. En ella espera reunir a "millón ó millón y medio de jóvenes", lo que la convierte en un acontecimiento importante para "España y para el bien común", y además, para la economía.

El cardenal Antonio María Rouco Varela, presidente de la Conferencia Episcopal Española, ha destacado en Radio Nacional la trascendencia de la Jornada Mundial de la Juventud, que está organizando del 16 al 18 de agosto en Madrid, coincidiendo con la visita del Papa. Ha señalado que, a unos dos meses de la cita, hay ya más de 400.000 jóvenes inscritos, cifra que podría incrementarse ya que, como ha recordado, en otras convocatorias sólo se inscribieron un tercio de las personas que finalmente asistieron, así que espera que en Madrid este verano se den cita "millón ó millón y medio de jóvenes".

Su poder de convocatoria convierte a la JMJ, a juicio de Rouco, en "un acontecimiento de extraordinaria importancia para España y para el bien común", a lo que se suma un componente económico: "Más de un millón de personas van a favorecer un poco la actividad comercial y económica en Madrid y en toda España" y ha subrayado que los gastos "primeros y básicos" que acarreará "corren cargo de los chicos que vienen y de la iglesia Católica en Madrid"

Cree que la cita tendrá una transcendencia "en la recuperación moral y espiritual de la conciencia del hombre y de la sociedad", factores que pueden ayudar en el momento que vivimos y que considera "crítico para la gran familia humana". "Con corazones limpios y entregados hay futuro para las grandes cuestiones de orden social, económico y político"

En su calidad de organizador de esta jornada, Rouco ha agradecido el apoyo que ha tenido por parte de las instituciones autonómicas y estatales, algo que cree que se debe a que "es una posibilidad tan extraordinaria de conocimiento de España, y de conocimiento mutuo, que a todos interesa favorecer".

La Iglesia ante la crisis económica

Preguntado por la postura de la Iglesia ante los recortes planteados con motivos de la crisis económica, ha explicado que la Conferencia Episcopal ya se pronunció hace un año para recordar que "los pobres no pueden sufrir en sus necesidades más básicas con la crisis y hay que dar una respuesta" y en ese sentido ha señalado que "la Iglesia está en una primera línea de respuesta a esos problemas".

Ha asegurado que las relaciones de la Iglesia con todos los partidos políticos son "de corrección, respeto y colaboración"; en cuanto al Gobierno ha recordado que "las relaciones Iglesia Estado están satisfactoriamente delimitadas en la Constitución y en los acuerdos firmados con la Santa Sede" y que "lo que pide la Iglesia, y que básicamente tiene, es la libertad para vivir su misión y para que así pueda servir al hombre y a la sociedad".

En cuanto a un posible cambio de Gobierno ha recordado que su papel seguirá siendo el mismo: "gane quien gane, haremos la misma exposición de la doctrina de la Iglesia".

Vocaciones

Rouco Varela ha reconocido que "el número de vocaciones ha descendido mucho" entre los jóvenes, algo que ha achacado en parte a que también ha bajado mucho el número de jóvenes.

Pese a ello se ha mostrado optimista, porque ha señalado que aunque aún "no es cuantitativamente desbordante", sí hay un repunte en las vocaciones, que hace entrever "un fondo joven de renovación eclesial que cada vez se nota más".